Fue inaugurada una Sala de Despedida COVID-19 en la Funeraria Airapí Memorial Park; para que los familiares de los fallecidos a causa de la pandemia puedan dar el último adiós, ya que por disposición sanitaria, no pueden velar a los difuntos como tradicionalmente se hacía.
Así lo destacó la directora de la funeraria, Ana Cecilia Cansino, quien aseguró que la intención es rendir un “tributo” a quienes han perdido la batalla contra la pandemia; y para sus familiares.
Esta nueva Sala de Despedida COVID-19 contará con todo lo necesario para realizar el ritual de despedida que se desee; y tendrá una capacidad máxima de ocho personas en una sala, durante 30 minutos; donde podrán acompañar el ataúd del difunto, a través de un cristal que divide ambos espacios.
“Esta sala es un lugar especial para que todos los familiares y seres queridos puedan despedir de una manera mucho más digna y por un espacio de 30 minutos a sus seres queridos. En esta pandemia, estos momentos de acompañamiento, de velación, se han perdido; por el propio COVID. Para nosotros es muy importante rendir tributo a estas personas y a sus familias”.
La directora resaltó que dicha sala es la primera en su tipo, no sólo en México, sino también en Latinoamérica y detalló que cuentan con dos crematorios que, en los meses de septiembre 2020 a enero de 2021, realizaban hasta 200 cremaciones por mes; de los cuales 60 por ciento correspondieron a muertes por COVID-19.
A esta inauguración asistió la directora del Instituto Latinoamericano de Tanatología, Charo Rosas, quien detalló que esta instancia colabora con la funeraria mediante terapeutas calificados y especialistas en diferentes áreas, con lo cual además de los servicios funerarios, se brinda acompañamiento en el duelo a quienes contratan sus servicios.
“El equipo del Instituto Latinoamericano está proveyendo de terapeutas calificados especialistas en diferentes áreas, para poder dar este acompañamiento como parte de lo que ofrece Airapí en sus paquetes”.
Enfatizó la importancia que tiene el ritual de despedida a los familiares que dejan este mundo para los seres humanos en general; y lo difícil que ha sido para los propios especialistas el tener que reinventarse, ante las restricciones por la pandemia, el número de fallecidos y la rapidez con que el virus en ocasiones quita la vida.