El Municipio de Corregidora actualizó y afirmó la máxima calificación que otorga la firma Moody´s por lo que conserva su perfil crediticio de Aa1.mx con en escala nacional y Baa1 en escala global, la cual refleja buenas prácticas de administración y gobierno, sólidos márgenes operativos, bajos niveles de deuda y una fuerte posición de liquidez.
Este resultado se logró tras la evaluación de prácticas realizadas durante el 2020. De acuerdo con la calificadora, y a pesar de que en 2021-22 el municipio enfrentará una disminución de los ingresos federales, se espera que Corregidora mantenga sólidos márgenes operativos como resultado de las medidas tanto en ingresos como en gastos, implementadas desde 2020.
Moody’s estima que los márgenes operativos promediarán 16.7% de los ingresos operativos durante 2021 y 2022, comparado con el 11.3% de 2020.
Debido a que el municipio ha registrado resultados financieros balanceados, en promedio, durante los últimos cinco años, cuenta con una fuerte posición de liquidez y bajos niveles de deuda, señala la calificadora.
Sus fortalezas crediticias son los bajos niveles de deuda y alta posición de liquidez; sólidos resultados operativos y financieros y su alta generación de ingresos propios. Sus retos crediticios, de acuerdo a la agencia, son los pasivos por pensiones pendientes y el rápido crecimiento demográfico que ejerce presión en gasto en infraestructura y en servicios públicos.
La perspectiva de la calificación se apega a la otorgada al Gobierno de México (Baa1, negativa) que es el techo aspirable de las calificaciones subnacionales en escala global.
Durante 2020, el municipio tuvo un impacto en su economía como resultado de la pandemia del coronavirus. De marzo 2020 a marzo 2021, el municipio perdió 763 empleos directos de 316 negocios que fueron dados de baja, sin embargo, derivado del crecimiento del sector inmobiliario y las medidas implementadas para contrarrestar los efectos negativos, mantuvo un alto nivel de ingresos propios, el cual fue equivalente al 66.2% de los ingresos operativos en 2020, superior a la mediana de 29.7% de los municipios calificados.
En particular, los impuestos representan la mitad de los ingresos operativos, por lo que su recaudación es muy relevante en el perfil crediticio de Corregidora. Durante 2020, a pesar de sus efectos por la pandemia, los impuestos crecieron 0.7%, mientras que
las participaciones crecieron en un 3.8%, lo cual representó el principal factor del crecimiento de los ingresos operativos.
Si bien la pandemia COVID-19 tuvo un fuerte impacto en la economía mexicana y Moody’s espera que en 2021 haya una lenta recuperación, las medidas implementadas por el municipio han resultado en un crecimiento del 23.4% de los ingresos propios a marzo 2021 con respecto a marzo 2020.
A pesar de las presiones de la pandemia y las relacionadas con el crecimiento del municipio que resultan en necesidades amplias de gasto en infraestructura y gasto operativo, el municipio logró mantener sólidos márgenes operativos durante 2020. El balance operativo en 2020 fue equivalente a 11.3% de los ingresos operativos, menor a años pasados, pero superior a la mediana de los municipios calificados por Moody’s de 6.4%.
Durante 2020, el resultado financiero fue de 2.3% comparado con el déficit de 3.2% de 2019. Corregidora tiene un muy bajo nivel de deuda. La deuda directa e indirecta neta fue equivalente a 3.9% de los ingresos operativos en 2020, comparado con un 3.7% de 2019. El servicio de la deuda del municipio es muy bajo, equivalente al 0.6% de los ingresos operativos.