La Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX) en Querétaro manifestó su preocupación ante la reciente decisión del gobierno de Estados Unidos de imponer un arancel del 17 por ciento al jitomate mexicano, tras la terminación del acuerdo de suspensión vigente desde 1996. Beatriz Hernández Rojas, presidenta del organismo en la entidad, calificó la medida como un riesgo tanto para la economía mexicana como para el mercado estadounidense.
“Desde COPARMEX Querétaro expresamos nuestra profunda preocupación por la imposición unilateral de un arancel del 17 por ciento al jitomate mexicano por parte del gobierno de los Estados Unidos, tras la terminación del acuerdo de suspensión vigente desde 1996. Esta medida representa no sólo un golpe directo a más de 400 mil empleos en el sector agrícola mexicano, sino también una amenaza al abastecimiento y los precios al consumidor estadounidense”, declaró Hernández Rojas.
La líder empresarial enfatizó la necesidad de mantener una relación comercial basada en el respeto mutuo y en los acuerdos internacionales vigentes, como el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), y no en decisiones unilaterales que incrementan las tensiones. “Una relación tan relevante como la de México y Estados Unidos no puede conducirse bajo presión o amenazas, sino sobre la base de respeto mutuo y los acuerdos legales y vigentes como el T-MEC”, dijo.
En su posicionamiento, Hernández Rojas advirtió que medidas como los aranceles afectan directamente las cadenas de suministro y elevan la inflación en ambos países. “Las tensiones comerciales no se resuelven con aranceles impuestos de manera arbitraria, por el contrario, estas acciones debilitan las cadenas de suministro, aumentan la inflación en ambos países y ponen en riesgo años de cooperación binacional. Consideramos que este tema debe seguir trabajándose a través de la mesa permanente de trabajo bilateral”, sostuvo.
Asimismo, la presidenta de COPARMEX Querétaro hizo un llamado al diálogo institucional como vía para solucionar conflictos y proteger los intereses productivos del país. Declaró que el respeto al Estado de derecho es esencial para la certidumbre de inversiones.
“Desde COPARMEX, reiteramos que la defensa de la legalidad, la estabilidad económica y el respeto al estado de derecho son fundamentales para la certidumbre de inversiones y la competitividad del país. A nuestros socios comerciales les decimos con claridad los desafíos comunes como la inseguridad y el tráfico de drogas deben atenderse con responsabilidad compartida, no con medidas proteccionistas que afectan a empresas, empleos y familias de ambos lados de la frontera”. Añadió que cuidar el T-MEC no sólo es una obligación jurídica, sino también “una estrategia de desarrollo regional que debemos proteger con determinación”.
