Es inconcebible garantizar un desarrollo económico sin antes garantizar un desarrollo ambiental, si no existe una estrategia clara para restaurar los ecosistemas que asegure la prevalencia de recursos naturales, estaremos perdidos.
Hace una semana escribí sobre la caída en el uso de energías limpias que tuvo nuestro país y la percepción en la que ello nos coloca a nivel internacional, ya no somos atractivos para los demás países, ya no querrán invertir en México de la misma forma en la que antes lo hacían, y si a esto le sumamos también la falta de planeación hídrica y el carente presupuesto federal en materia de medio ambiente; el panorama es más desalentador. ¿Pero esto por qué esta pasando? Muy sencillo porque al frente del país tenemos a un presidente que solo está pensando en las próximas elecciones y en cómo tener un control absoluto del poder; la energía, el agua, el cambio climático pueden esperar y con ello las próximas generaciones.
En la pasada COP 27 Antonio Guterres, Secretario General de la ONU mencionó que como humanidad estamos enfrentando la disyuntiva de “cooperar o morir” así de claro es el mensaje, hoy como sociedad debemos además de exigir cooperar, participar, pero también cambiar para evitar que nuestro querido país siga caminando en retroceso.
Afortunadamente en Querétaro hoy veo luz en el camino en muchos temas, hay agenda para combatir el cambio climático , una ruta hacia la descarbonizarbonización bien definida y también para defender el uso de nuestra tierra, un ejemplo claro sucedió la semana pasada, una voz fuerte y determinante se manifestó a favor del medio ambiente, en especifico de Tierra Noble; después de que ejidatarios de El Zapote, El Nabo y San Miguelito dieran a conocer que se retomaría la venta de lotes en el proyecto “Tierra Noble”, en Juriquilla; Luis Bernardo Nava, Presidente Municipal dé Querétaro defendió esta zona argumentando que está protegida como área natural, y sin dejar duda en su declaración sostuvo que esa área es de reserva, y que no se va a emitir ninguna licencia y ningún permiso de desarrollo urbano, que se debe de mantener y cuidar únicamente para servicios ambientales.
Debo confesar que me sorprendió para bien su declaración porque esa visión ambientalista sobre la economicista es la que nos asegurará un verdadero crecimiento, esas decisiones que anteponen el bienestar público sobre el privado son las que convierten a un político en estadista, bien Presidente, y bien por Querétaro, que hoy se esta convirtiendo en una bocanada de aire fresco para nuestro país con su agenda ambiental.