La Iglesia expresó su condena a la violencia que se ha normalizado entre los jóvenes, después de que se viralizaran casos de peleas violentas en los últimos días, dejando a algunas víctimas hospitalizadas por las lesiones causadas por los golpes.
La Iglesia hizo referencia a casos como el del joven Ernesto en Puebla, cuyo video de una brutal golpiza se volvió viral en redes sociales. Ernesto se encuentra hospitalizado con fracturas en la cara y corre el riesgo de perder la movilidad de su ojo.
En Quintana Roo, otro joven fue golpeado brutalmente por un grupo de aproximadamente 15 adolescentes, dejándolo inconsciente y con una fractura craneoencefálica.
La Iglesia señaló que la violencia entre jóvenes tiene múltiples causas, desde la falta de atención de los padres hasta la exposición continua a contenidos violentos y la pérdida de valores.
La Iglesia criticó a las “máximas autoridades de gobierno” por ejercer una constante violencia verbal, y señala que deberían ser un ejemplo de respeto y tolerancia para mostrar a la población que la política es un servicio al bien de la familia humana.
La Iglesia destacó también que algo está mal en las familias al poner la violencia por encima de los valores, y enfatiza la necesidad de establecer límites oportunos y precisos para que los jóvenes caminen por la vida de manera segura.
Dentro de la publicación se comentó que la exposición continua a contenidos violentos ha contribuido a normalizar la violencia entre los jóvenes, al grado de justificarla y practicarla, convirtiéndola en sinónimo de poder y admiración.
La Iglesia concluyó destacando que el cambio no puede esperar solo de las autoridades, sino que debe empezar en las familias. Afirma que son los jóvenes quienes construyen el futuro y que lo último que se desea es un futuro violento.