La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) condenó el asesinato en Chihuahua de dos sacerdotes jesuitas en la Sierra Tarahumara.
Los padres Javier Campos y Joaquín César Mora de la Compañía de Jesús fueron asesinados al interior de una iglesia en Cerocahui, municipio de Urique.
Condenamos públicamente esta tragedia y exigimos una pronta investigación y seguridad para la comunidad y todos los sacerdotes del país”, indicó la CEM en un comunicado.
Primeros informes señalan que los sacerdotes jesuitas fueron asesinados por defender a un hombre que había ingresado a la iglesia en busca de refugio.
Los sujetos armados que lo perseguían asesinaron al hombre y a los curas. Posteriormente se llevaron sus cuerpos.
De acuerdo con el presidente Andrés Manuel López Obrador ya se tiene información sobre los presuntos asesinos.
Urique está en la sierra de Chihuahua, de Creel hacia adelante, por Témoris, por Chiapas. Es una zona de bastante presencia de la delincuencia organizada”, dijo en conferencia de prensa.
El sacerdote jesuita Javier Ávila, mejor conocido como ‘Pato’, identificó al responsable de las muertes como ‘El Chueco‘, quien detalló, es “cabeza de delincuentes”.
También denunció amenazas sobre la comunidad de Cerocahui en caso de abundar en detalles.
Con información de López Dóriga Digital