En estas últimas semanas se ha dado un fenómeno que vale la pena observar y es una exposición fuera de lo común que se llama Luces de Neza York.
Un ensayo interesante de curaduría y visión. Donde lo importante no son trayectorias o curriculums o firmas, sino que se le da juego a un tipo de curaduría diferente, o más bien, existe una curaduría, se ejerce un comisario en busca de talento. Y no es un refrito de 1989, donde muchos otros lugares abusan del volver a exponer al mismo artista y la misma obra. Así siempre
Podemos volver a ver a Kahlo, Marín, Orozco en un juego de siempre estar ocupando lugares con estampitas repetidas como en el recreo donde intercambiábamos para llenar el álbum. Demasiadas cosas sin riesgo.
El viernes 8 de mayo, la Galería Casati (General Prim 14, Colonia Juárez) encendió sus espacios con Luces de Neza York, una exposición colectiva que reunió a más de sesenta artistas originarios o vinculados con Ciudad Neza . Bajo la curaduría del mexicano – francés Michel Mallard, la muestra fue concebida como un puente entre la periferia y el “centro”, invertiendo los roles tradicionales: en lugar de que Nezahualcóyotl albergue la muestra, ésta llega al centro de la capital .
Un recorrido crudo, honesto y sin filtros
Desde el momento de su apertura, más de cien personas hicieron fila para entrar a la galería, ansiosas por descubrir piezas que conjugan fotografía, escultura, pintura e instalaciones expansivas que, en ocasiones, atraviesan barreras físicas del espacio expositivo . Los trabajos —de nombres como Sonia Madrigal, Alejandro Pérez Cruz, Samantha Canchola, Emiliano Guerrero, Fershow Escárcega o Naohmi Domínguez, entre otros— revelan una narrativa ansiosa que habla de tensión, resiliencia, invención e identidad .
Luces de Neza York hace el trabajo son historias perdidas, encontradas Nezahualcóyotl tiene tensión predeterminada, la misma expresión “yo vengo de neza” un día me lo dijo el cochero del carrito a caballo en Central Park en NY y de inmediato me definió con quién estaba yo hablando
Ecos marginales que invaden la calle
La experiencia de la muestra se extendió más allá del cubo blanco. El bar vecino, Cinco Pies, se sumó a la energía con sonidero en vivo —Sonidero Marginal, Juls Tarará y AVIXVIII— mientras el chef Edgardo Ganado Kim ofrecía un “platillo de cocina impura”, una creación culinaria híbrida que respondía a la vibrante dualidad de la exposición .
Así, los asistentes tomaron la banqueta, convirtiéndola en una extensión natural del espacio expositivo: artistas, curadores, vecinos y paseantes coincidían, conversaban y se mezclaban, como una prolongación callejera de la periferia .
Un manifiesto contra la centralidad
Durante la inauguración, Michel Mallard expresó con vehemencia la razón de ser de la exposición:
“Estamos aquí para celebrar la periferia. En Nueva York, París, Londres… el centro se volvió predecible. Las rentas son tan altas que ya nadie puede crear.”
Y lanzó una consigna:
“No nos interesan los nombres conocidos. Nos interesa la creación.”
Esa frase dio cuerpo a la exhibición, cuestionando la lógica del arte contemporáneo obsesionado por el prestigio y el mercado, y reclamando un espacio para relatos periféricos, vivos, auténticos.
Éxito y prolongación
La respuesta del público fue contundente. La muestra —con un cierre programado el 21 de junio— logró extenderse hasta el 19 de julio por la alta demanda . Esta ampliación confirma la relevancia de llevar historias de la periferia al centro y la necesidad de espacios que exhiban otras miradas del tejido urbano mexicano.
“Luces de Neza York” es una demostración de que el arte no siempre nace en los grandes centros; también arde en los márgenes, en las calles de Neza, en sus luces, en su gente. Una experiencia poderosa que deja claro que la verdadera innovación artística muchas veces surge lejos del centro.
La periferia permite nuevas metáforas, el main stream es cada vez más de lo mismo.
Fue en Galería Casati y Cinco Pies, General Prim 14, Col. Juárez, CDMX.
La exposición cierrra el 19 de julio de 2025.
Aquí, una breve semblanza de Michel Mallard, el curador detrás de Luces de Neza York
Origen y formación: Nacido en Ciudad de México en 1968, Mallard radica en París desde hace varias décadas .
Perfil profesional: Es curador, fotógrafo y director creativo. Ha colaborado con grandes revistas de moda y arte como Vogue Hommes International, L’Officiel, Marie Claire Japan, Biba, Jalouse, Colors, entre otras .
Director artístico: Desde 1998 hasta 2013 dirigió la parte artística del Festival Internacional de Moda y Fotografía de Hyères, uno de los eventos más prestigiosos del medio .
Editorial y libro: Colaboró en revistas culturales como L’Autre Journal en su etapa inicial. Además, ha diseñado publicaciones y libros fotográficos para editoriales como Steidl y Schirmer/Mosel, con autores como Thomas Ruff, Candida Höfer y Jean‑Baptiste Mondino .
Visión creativa
Como director creativo, ha liderado campañas para marcas de lujo como Kenzo, Jean Paul Gaultier y colaborado con la revista Vogue Homme International, mezclando moda, cultura y arte .
Su enfoque curatorial se ubica en la intersección de lo contemporáneo, lo urbano y lo periférico. En el caso de Luces de Neza York, grabó desde París su convicción de que las periferias —como Nezahualcóyotl— albergan expresiones culturales poderosas, libres y genuinas, un contrapunto a los centros urbanos tradicionales .
Michel Mallard es un curador y creativo mexicano‑francés con una sólida trayectoria en medios de moda, fotografía y arte. Su mirada amplía los límites del arte contemporáneo, apostando por dar voz a los márgenes urbanos y a creadores emergentes con propuestas potentes y auténticas.