Como se esperaba, la ceremonia por el 106 Aniversario de la Promulgación de la Constitución de 1917 se convirtió en un choque de poderes; Por un lado, la Ministra Presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación Norma Lucía Piña Hernández, primera mujer en encabezar el máximo ente Judicial del país, reivindicó la independencia del Poder Judicial y realizó una serie de desplantes en contra del Ejecutivo Federal; Nunca se dirigió a López Obrador por su nombre ni le fue a saludar al término del discurso; Por parte del Ejecutivo, el mensaje también fue contundente; Tanto Creel como la Ministra Hernández, fueron sentados en la extrema izquierda. A la orilla y no junto al Presidente como se hacía históricamente.
Frente a la República, la Ministra Norma Lucía Piña se dijo orgullosa de pronunciar el mensaje a nombre de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y del Consejo de la Judicatura Federal “El Orgullo, pero sobre todo la responsabilidad se potencia por un hecho. Por primera ocasión en nuestra historia, una mujer preside el Poder Judicial de la Federación”. Se comprometió a reducir la brecha de género y a colaborar para tener un país mejor pero sobre todo, a defender la independencia del Poder Judicial.
Al recordar la sangre derramada y las luchas intestinas que se dieron previo a la promulgación de nuestra Constitución, Norma Lucía Piña advirtió que las injusticias, generan descontento, enojo y violencia. Aseveró que para obtener soluciones de largo aliento, se deben crear conceptos, ideales y convicciones de lucha política y el fortalecimiento de las instituciones “Así ha sido en la búsqueda de la igualdad entre las personas con independencia de credos, nacionalidades, condición económica y de género.
Enfrentar estas injusticias, ha sido el mejor motor de las causas de toda la humanidad. Quienes se reunieron en este gran recinto, supieron hacer suyas esas causas.Plasmarlas en leyes. En instituciones. Para salir de la guerra fraticida y construir la gran nación que hoy conformamos. Esa es la lección que imponen estos muros y que no debemos olvidar ni menospreciar”.
Norma Lucía Piña, exigió evitar los encuentros estériles; Reuniones con bellos ejercicios de oratoria, para luego volver al escritorio con la falsa sensación del deber cumplido. Como representantes de los poderes -dijo-, se tienen que esforzar más; Cuestionar y cuestionarse, replantear las maneras para lograr un cumplimiento cabal de la Constitución “La ley suprema tiene que ser una realidad en aras de la dignidad de cada persona.De la consecución de los fines del proyecto nacional. La dignidad, se construye día a día con respeto entre los individuos. Entre los poderes e incluso entre las naciones”. Añadió que para hacer frente a la enorme deuda histórica, el rol de quienes imparten justicia resulta crucial “Así lo asumo. Así lo asumimos. Nuestra principal responsabilidad es garantizar el acceso a la justicia.Viendo por la dignidad humana a través de la promoción, protección, respeto y garantía de los derechos humanos contenidos en nuestra Constitución. Conforme al paradigma de la centralidad de los derechos humanos, el Poder Judicial, guiado por la Constitución no solo resuelve las controversias . No solo pacifica los conflictos; Promueve y cataliza el cambio social. No es accidental que en el vestíbulo principal de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, esté grabado “ Somos siervos de la ley suprema para poder ser libres. Nuestro actuar, debe estar apegado al derecho para evitar arbitrariedades. Para de cara a la sociedad, rendir cuentas en el ejercicio de nuestra función. Los juzgadores, estamos siempre sujetos al imperio de la ley. Pero nuestra función no se limita a una aplicación formal. Por mandato Constitucional, la impartición de justicia exige también interpretar la ley, atendiendo a los valores y principios inmersos en las normas para así decidir cada caso en concreto”.
La Ministra Presidente, reconoció y celebró la diversidad de perfiles éticos al interior de la Suprema Corte de Justicia. Aseveró que la diversidad no solo es inevitable, sino deseable “
Nunca, nunca perder de vista la independencia judicial. La de los juzgadores y la de uno de los poderes constitutivos de la República. Una Judicatura independiente es pilar de nuestra democracia. Es el legado que nos transmite nuestra ley fundamental. Tenemos la responsabilidad de preservar y fortalecerla. De lo contrario, corremos el riesgo de mermar esta garantía en detrimento de las propias personas que nos demandan justicia ”. Acotó que la independencia judicial, no es un privilegio de los jueces. Es -dijo- el principio que garantiza una adecuada impartición de justicia para hacer efectivas las libertades y la igualdad de las y los mexicanos. Añadió que la independencia judicial, es la principal garantía de imparcialidad del Poder Judicial, siempre en beneficio de la sociedad.
En su momento, el Presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Santiago Creel Miranda, sentenció que es un error el pensar que los problemas del país se resolverán con ordenamientos Constitucionales que no se cumplen. Peor aún -dijo- con cambios a la Constitución o las leyes, como si por el hecho de modificar una norma, la realidad en automático cambia
“El pueblo es y siempre ha sido muchos Méxicos. No solo uno y menos homogéneo. El principio democrático, es que la mayoría decide. De eso no hay duda ni debate. La cuestión, es, como se decide.Si incluye o no a los que piensan diferente. Al excluirlos, se deja afuera parte del pueblo”.
Creel Miranda, llamó a encontrar la unidad nacional mediante el diálogo. No con la visión única que va contra la democracia.
Aseveró que tras dos alternancias incuestionables, se hubiera esperado que hubiera un amplio consenso alrededor de las instituciones y a las reglas “Esto no es así. Los acuerdos se frustran. Lo que debe resolver la política y el diálogo. Eso nos toca a nosotros, incomprensiblemente, el Tribunal lo tendrá que dirimir” .
“Rectifiquemos, aún estamos a tiempo, no tenemos por qué repetir los errores del pasado”, destacó el diputado panista. La política, acotó el ex secretario de Gobernación, es la conciliación de intereses encontrados y la historia constitucional demuestra – agregó– que el diálogo ha sido la piedra angular para la construcción de la República “Todos, tenemos el derecho de defender nuestras creencias, ideologías y nuestras posiciones políticas. El límite, es la Constitución, los tratados internacionales y por supuesto, el respeto a la vida institucional”.
Quien saltó a la defensa de la 4T, fue el Senador Alejandro Armenta Mier, Presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República. Al tomar el micrófono, externó que desde el Congreso, se ha gestado la “Ley de austeridad Republicana”, sentido reclamo de la sociedad. Recordó que se ha materializado la ley de economía circular para proteger el medio ambiente, la Guardia Nacional, la Ley General de Salud “Somos el primer país en el mundo con obesidad infantil. El segundo con obesidad en adultos.
La diabetes es la segunda causa de muerte. Reformamos el Artículo 108 y 111 para la revocación de mandato. El pueblo pone y el pueblo quita”.
Armenta Mier, aseguró que hoy, es delito grave el fraude electoral, la corrupción y el robo de hidrocarburos “sinónimos de la corrupción del régimen Presidencial. Logramos la ley de extinción de dominio, se creó la ley contra empresas fantasmas y facturación falsa, base del saqueo a la Patria, que tanto indigna a la población. Creamos la ley de Juicio Político. Reformamos el Artículo 28 para eliminar la condonación de impuestos que beneficiaban a las empresas e intereses extranjeros”. Presumió que todas las reformas, han sido sin necesidad de un Constituyente, son resultado del movimiento social que encabezó el Presidente Andrés Manuel López Obrador “Afirmo categóricamente como Presidente del Senado, que el humanismo mexicano expresado por el Ejecutivo Federal, es un concepto sustentado en la razón jurídica.
El Presidente del Senado, dijo que se ha logrado pasar de aquellas instituciones que entregaron la riqueza nacional y recursos naturales al exterior, a la consolidación de las instituciones políticas inclusivas que permitirán el desarrollo de México para las próximas generaciones . Añadió que nuestro país alcanzará la soberanía energética para poder aspirar a la soberanía financiera, con lo que se logrará distribuir de manera justa la riqueza en los hogares de México.
Foto: Martha Flores
Periodo Neoliberal, retroceso acusa AMLO
Para cerrar el evento, el Presidente Andrés Manuel López Obrador acusó que el periodo neoliberal entre 1983 y el 2018, fue un gran retroceso en defensa de la soberanía y el bienestar del pueblo.
Hasta el punto -dijo-de casi resucitar la política económica y social de Porfirio Díaz “Es indudable que esta regresión tuvo como acicate el predominio, por más de tres décadas, del imperio de la corrupción. En consecuencia, este afán de lucro desmedido condujo a modificar los principios y las normas de la carta magna hasta casi despojarla de su letra y espíritu original, y los dogmas neoliberales y los intereses oligárquicos fueron introducidos en el texto constitucional, a fin de prevenir y obstaculizar cualquier transformación en sentido nacional, democrático y popular”.
Andrés Manuel López Obrador, acusó que durante 36 años, se fueron aprobando reformas entreguistas, antipopulares y contrarias al interés público. Señaló que se legalizó la venta de empresas públicas, bancos, minas y tierras ejidales. Refirió la entrega de concesiones y contratos en materia de petróleo, electricidad y telecomunicaciones “Se privatizaron los ferrocarriles, los puertos, los aeropuertos y hasta las cárceles. Se limitó la gratuidad de la educación pública. Se aumentaron impuestos para la mayoría de los consumidores, mientras se condonaban pagos a grandes contribuyentes. Se aprobaron leyes para convertir deudas privadas en deuda pública”, dijo el Ejecutivo Federal.
Otro de los señalamientos del Presidente, fue en el sentido de que durante el periodo liberal, se redujo el salario mínimo como no sucedía desde el porfiriato. Acusó que se instauró como gobierno una democracia simulada “operada y controlada por políticos y tecnócratas, afines y dependientes, empleados de los grandes poderes económicos”.. Se dijo orgulloso que frente al “Vergonzoso retroceso”, y con la frente en alto se puede sostener que millones de mexicanos lograron la aprobación de algunas reformas en el Congreso con el distintivo de la honestidad y el humanismo.
