La Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) conmemoró los 20 años del plantel de la Escuela de Bachilleres en Pedro Escobedo, con una ceremonia que reunió a estudiantes, docentes, egresados, egresadas y personal administrativo que han sido parte fundamental en dos décadas de historia. Desde su apertura en julio de 2005, durante el rectorado de Dolores Cabrera, este centro educativo se ha consolidado como un referente de desarrollo académico y comunitario.
Durante el acto conmemorativo, la rectora Silvia Amaya Llano destacó la importancia de este espacio en el crecimiento de la demarcación y reconoció el papel de los gobiernos municipales y de la Secretaría de Educación como aliados permanentes de la UAQ y de la Escuela de Bachilleres. Subrayó que el trabajo colaborativo, acompañado del sentido de comunidad, permite generar resultados de gran impacto en beneficio de la juventud.
La rectora también recordó a quienes, hace dos décadas, tuvieron la visión de expandir el alcance de la Universidad hacia Pedro Escobedo, así como a excoordinadores, exdirectores, profesoras, profesores y administrativos que han dejado una huella profunda en la formación de generaciones.
En representación del municipio, el presidente Juan Alberto Nava Cruz reconoció la relevancia del plantel en la vida educativa de la región y anunció una inversión inicial de 1.5 millones de pesos para la construcción de una nueva aula, lo que permitirá ampliar la infraestructura del bachillerato y atender mejor a la comunidad estudiantil.
Por su parte, el director de la Escuela de Bachilleres, Anghellus Medina López, sostuvo que el liderazgo de la rectora Amaya Llano ha fortalecido el compromiso social de la Universidad y, junto con la colaboración de autoridades gubernamentales, se han materializado proyectos que reflejan una visión compartida.
La celebración concluyó con la entrega de reconocimientos a personal docente y administrativo, incluyendo fundadores que dedicaron parte de su vida al crecimiento del plantel y a quienes se han sumado recientemente a la comunidad. Cada homenaje, señalaron las autoridades, representó un gesto de gratitud hacia la responsabilidad y vocación que sostienen los pilares de la UAQ.








