La falta de operaciones en aduanas del país por una actualización del Servicio de Administración Tributaria (SAT) tendrá impactos severos -todavía no calculados- para importadores y exportadores, mismos que serán trasladadas a consumidores finales, de acuerdo con expertos.
En los últimos días, el comercio internacional se vio frenado por fallas en los módulos de validaciones en el Sistema de Modelo de Administración Tributaria de Comercio Exterior en las aduanas del país, debido a una actualización que reconoció el SAT.
Las mercancías pueden mantenerse en promedio entre cinco y siete días en recintos fiscalizados, pero después de ese plazo, se empieza a cobrar almacenamiento, costo que se pasará al público final, explicó Rosaura Aguilar, integrante de la Comisión Técnica de Comercio Exterior del Colegio de Contadores Públicos de México (CCPM).
En aduanas marítimas, el cobro es de alrededor de mil 500 pesos por día y generalmente los importadores o exportadores traen entre 10 y 20 contenedores, lo que por día adicional generaría un costo de almacenaje de hasta 30 mil pesos, añadió el experto.
Agregó que en el caso de la carga congelada, podría ya no ser útil, porque tienen plazos específicos para entrar y salir de la aduana, alertó. Esto afectará a importadores o exportadores de carnes, pescados, flores y otros productos.
“Desgraciadamente, seremos los usuarios finales los que acabaremos pagando parte de eso”, recalcó.
Consideró difícil estimar el costo total de las pérdidas por el número de operaciones en aduanas, aunque los ingresos del SAT no se verán afectados, pues los agentes aduanales deberá ponerse al corriente con los pagos.
Georgina Estrada, presidenta de la Asociación de Mujeres Aduaneras (AMA), coincidió en que esta situación generará pérdidas para los afectados, sobre todo por el tiempo extra que deberán mantener su mercancía en los recintos.