El peso podría caer drásticamente si el próximo Gobierno y el Congreso de México adoptan una agenda poco ortodoxa que socave las instituciones, de acuerdo con Morgan Stanley.
En caso de un escenario bajista -que el banco de Wall Street describe como “retroceso institucional”- el peso se debilitaría alrededor de 11 por ciento, a 19.20 unidades por dólar, desde las actuales 17.
Incluso, en un escenario más probable de continuidad de la política, después de la votación del 2 de junio, la moneda se debilitaría 5.6 por ciento frente al dólar en un horizonte de 12 meses, dijo el banco.
“México ha recibido una mano dura, beneficiándose del fuerte vínculo con Estados Unidos y del potencial de nearshoring.
“Sin embargo, se necesitan reformas significativas para aprovechar esto plenamente”, escribieron estrategas del banco en una nota el domingo.
Claudia Sheinbaum, candidata presidencial de Morena, tiene una fuerte ventaja sobre la candidata de la Oposición Xóchitl Gálvez antes de la votación de junio.
No se espera que ninguno de los principales candidatos implemente grandes ajustes fiscales, al menos en el corto plazo.
Sheinbaum ha sido vaga sobre planes fiscales más amplios, mientras que Gálvez dijo que no llevaría a cabo una reforma fiscal en la primera fase de una posible Administración.
Para el banco, el dólar debería alcanzar un máximo frente al peso en medio del ruido electoral estadounidense en el cuarto trimestre y luego consolidarse alrededor de 18 unidades.
