En el primer bimestre, los ingresos petroleros del sector público cayeron 83 por ciento anual, a consecuencia de los estímulos fiscales que el Gobierno otorgó a la empresa.
Los ingresos en el Fondo Mexicano del Petróleo (sin considerar los de la recaudación de ISR por nuevos contratos y asignaciones en hidrocarburos) sumaron 7 mil 824 millones de pesos, 35 mil 851 millones menos que en el mismo lapso de 2023, de acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda.
El monto también fue 18.7 por ciento menor a los 59 mil 748 millones de pesos que programó la dependencia federal para ese periodo.
El Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) explicó que pese al alza del precio de la mezcla mexicana, debido a los apoyos otorgados a Pemex los ingresos se verán afectados.
No se perciben recursos por el cobro del Derecho de Utilidad Compartida (DUC) ni por el Derecho de Extracción de Hidrocarburos, expuso.
En febrero, el Presidente Andrés Manuel López Obrador anunció, mediante un decreto, un alivio fiscal para Pemex que consiste en eximir del pago de ambos derechos de octubre de 2023 a enero de 2024.
De hecho, estos estímulos provocaron que los estados y municipios dejen de recibir participaciones federales por 50 mil millones de pesos, estimó Moody’s.
“El otorgamiento de estímulos fiscales para Pemex se ha vuelto más común, contribuyendo a una reducción en los ingresos petroleros que comparte el Gobierno federal tanto con las entidades federativas como con los municipios a través de las participaciones.
“Esta acción buscan aliviar presiones financieras en la petrolera, pero limitan los ingresos petroleros del sector público, contribuyendo a menores participaciones para estados y municipios”, alertó.
Anticipó que en meses futuros las participaciones quedarán entre 3 y 4 por ciento por abajo de lo estimado en el Presupuesto.