A casi cinco años de haberse inaugurado estas instalaciones, actualmente no opera la base de la Cruz Roja Mexicana, delegación Querétaro, ubicada en la delegación Santa Rosa Jáuregui, a un costado del panteón municipal.
El predio fue donado por parte de la administración del alcalde Marcos Aguilar Vega, en 2018, a la institución; entonces encabezada por el delegado estatal Rodrigo de Villasante Herbert; y fue hasta 2019, durante el inicio del gobierno de Luis Bernardo Nava Guerrero, que se apoyó para la construcción del inmueble, que cuenta con recepción, andén para dos ambulancias, dos consultorios, dormitorios, sala de estar y un centro de comunicaciones y capacitaciones.
Dicha obra tuvo una inversión cercana a los 10.5 millones de pesos; de cuales el municipio dio al menos 5 millones de pesos para la construcción del edificio; mientras que el monto restante corresponde al costo del terreno, de 5.5 millones de pesos.
Se proyectaba que, al ofrecer sus servicios en materia de urgencias y atención prehospitalaria las 24 horas del día, se beneficiarían alrededor de 18 mil usuarios; de una zona que, particularmente carece de servicios de salud a costos accesibles.
Y es que Santa Rosa Jáuregui, actualmente, cuenta con la Unidad de Medicina Familiar no. 11 del Instituto Mexicano del Seguro Social; un centro de Salud de la Secretaría de Salud Estatal; además de al menos cuatro clínicas particulares y la Clínica integral de la Universidad Autónoma de Querétaro.
Por ello, se había considerado necesaria la presencia de la Cruz Roja en la zona norte de la ciudad, y particularmente en dicha delegación, que sufre de las problemáticas de violencia que generan lesionados y de accidentes viales en la carretera 57 y Paseo de la República; con el objetivo de generar una atención más inmediata ante las emergencias.
En el marco de la conmemoración del 24 de junio, día internacional del Socorrista, hoy en día, en este inmueble ejecutado en un predio de cinco mil metros cuadrados, se puede apreciar en total abandono, con visibles afectaciones por vandalismo y sin presencia de vigilancia.
Los vecinos de la zona aseguran que, a raíz de su inauguración, solamente llegaron a operar durante algunos meses; para después dejar de observar movimiento, personal y ambulancias en las instalaciones.