La inflación en los vehículos nuevos en México sigue en desaceleración, pues en enero del 2024 promediaron un alza anual del 3.4%, por debajo del 7% de enero del año pasado, revelan cifras del Inegi.
Al respecto, fuentes del sector automotriz adelantaron que la tendencia seguirá a lo largo del presente año.
Las cifras del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) del Inegi refieren que el incremento del mes pasado fue el más bajo para cualquier mes en los últimos cuatro años, es decir, desde febrero del 2020 y también la tasa más baja para cualquier enero desde el 2021.
También muestran que por tercera ocasión consecutiva, la inflación de los autos quedó por debajo del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), ahora con un margen del 29.7 por ciento, el mayor diferencial desde noviembre del año 2018.
En los últimos cuatro años, el máximo incremento que tuvieron los vehículos ligeros (con peso menor a 3.5 toneladas) fue en el marzo del 2021, con un encarecimiento anual promedio del 9.5%.
Dicho nivel alcanzado derivó del aumento que sufrieron los precios internacionales del acero, aluminio, cobre, plásticos y otros commodities (materias primas industriales) por la reactivación económica de China y después de Estados Unidos, tras superar los primeros embates de la pandemia del Covid.
En el 2022, la inflación en los autos nuevos se mantuvo alta, al promediar 8.5 por ciento, esto debido también a la escasez global de chips o semiconductores.
Los datos del Inegi arrojan que desde noviembre del 2022 los aumentos de precios en los vehículos iniciaron una racha bajista, la cual se ha mantenido hasta ahora en el año 2024.