Sergio Ángeles
Agencia Reforma
Para lo que queda del año, el peso mexicano aún está en la mira de distintos eventos que podrían aumentar su volatilidad y restarle valor frente al dólar estadounidense.
La contienda presidencial en Estados Unidos entre la demócrata Kamala Harris y el republicano Donald Trump se perfila como uno de los principales riesgos que podría disparar al dólar.
“Este periodo electoral no estará exento de sobresaltos y declaraciones controversiales, lo que podría aumentar la volatilidad en el tipo de cambio.
“Sobre nuestra proyección podemos encontrar momentos de volatilidad que podrían llevar al tipo de cambio, ya más pegado a la fecha de las elecciones en Estados Unidos (noviembre), a un rango entre 20.50 y hasta 21.38 pesos por dólar”, argumentó Nicolás Eguiarte, director de Negocios de Banco Base.
Después del proceso, indicó que el tipo de cambio podría retomar una ligera tendencia a la baja y cerrar el año entre 20.30 y 20 pesos por dólar.
Otro evento que se asoma como un posible riesgo para la paridad peso/dólar es la presentación del Paquete Económico de 2025, que deberá darse a conocer a más tardar el 15 de noviembre.
“Creemos que el Paquete también puede inyectarle un ingrediente de volatilidad al panorama para el tipo de cambio, sumándose también los efectos que pudiera tener sobre el ánimo de los inversionistas las propuestas de reformas constitucionales”, explicó Eguiarte.
Advirtió que dichas reformas -que contemplan la desaparición de organismos autónomos- podrían ocasionar a futuro un detrimento en el perfil crediticio de México y en consecuencia, en la moneda nacional.
“La pérdida de calificación crediticia sin duda tendría un impacto directo al tipo de cambio.
“Esto no quiere decir que la nota se va a bajar mañana ni mucho menos, pero las agencias crediticias han remarcado que estarán atentos a los indicadores macro del País, sobre todo en el déficit público”, expuso el analista de Banco Base.
Para cualquier país, la pérdida de la nota soberana se traduce en un fuerte golpe tanto a la inversión como a su divisa, advirtió Víctor Herrera, presidente del Comité Nacional de Estudios Económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).
“Saldrían muchos capitales que han invertido en México, en los fondos principalmente de deuda que tienen la deuda soberana del país, entonces tendríamos una depreciación importante del peso.
“Tendríamos altas tasas de interés, tanto internas como externas porque ya seríamos otro nivel de riesgo, completamente diferente. Se inhibiría la inversión”, ejemplificó Herrera.
Hizo mención del caso de Colombia, cuya moneda se depreció 30 por ciento en una primera etapa luego de que una sola agencia crediticia le retirara el grado de inversión.