El presidente de la Unión de Organizaciones del Campo del Estado de Querétaro (UNOCEQ), Francisco Perrusquía Nieves, advirtió que el 2025 estará marcado por una nueva crisis para el campo queretano. Factores como la persistente sequía y la incertidumbre sobre los apoyos federales podrían agravar la situación que los productores han enfrentado en los últimos años.
Perrusquía Nieves destacó que México enfrenta un problema severo en materia de agua, con sequías excepcionales registradas en gran parte del territorio nacional durante los últimos dos años, afectando también a varios municipios de Querétaro. Aunque el año pasado se registraron lluvias intensas en agosto, septiembre y octubre, estas no fueron suficientes para llenar las principales presas del estado a su capacidad total.
“Las presas grandes no se llenaron a pesar de la buena presencia de lluvias. La Constitución de 1917 quedó al 70 por ciento de su capacidad, mientras que la de Amealco alcanzó solo el 60 por ciento. Esto representa un problema serio, ya que estos embalses abastecen zonas de riego esenciales para la producción agrícola”, señaló el dirigente.
A esta situación se suma la preocupación sobre la asignación de recursos al campo por parte del Gobierno Federal. Perrusquía Nieves recordó que el actual sexenio se ha caracterizado por un notable abandono del sector primario y la reducción de apoyos a los agricultores. La continuidad de esta política podría poner en riesgo la producción de alimentos básicos, afectando no solo a los productores, sino también a la población en general.
El dirigente también mencionó que, durante la administración del expresidente Andrés Manuel López Obrador, el programa “Producción para el Bienestar” redujo el número de beneficiarios en Querétaro, pasando de 36 mil agricultores a solo 18 mil que actualmente reciben apoyo gubernamental.
“Nos preocupa que siga este descuido y olvido al campo, pues también significa el abandono de la producción de alimentos para las ciudades y sectores como la industria, el comercio y el transporte. Es un problema que afecta a todos”, enfatizó Perrusquía Nieves.