Moisés Ramírez
México es autosuficiente en maíz blanco para consumo humano y el grano que cosecha no es transgénico, por lo que en ese renglón la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ya saldó el compromiso que hizo la semana pasada.
Desde el 2012 la producción nacional de maíz blanco ha cubierto en promedio 1.8 veces el consumo humano nacional de este cereal en el País y 1.04 veces el consumo total nacional aparente, revelan cifras de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader).
Sin embargo, agricultores coinciden en que ahora el desafío del nuevo Gobierno federal será elevar la producción de maíz amarillo del cual, según las cifras oficiales, México importa ya el 47.5 por ciento del consumo total nacional aparente del grano.
“México tiene décadas de que es superavitario en maíz blanco para el consumo humano en casi el doble; el problema de grave escasez está en la producción de maíz amarillo y el nuevo Gobierno federal debiera enfocarse en solucionar eso apoyando a los medianos y grandes productores con la reactivación de los apoyos para coberturas y financiamiento a tasas blandas”, expresó Rubén Chávez, ex Secretario de Desarrollo de Rural en Chihuahua y agricultor de maíz amarillo.
“Chihuahua es el principal productor de maíz amarillo en México y eso (coberturas y financiamiento) daría certidumbre al agricultura para pactar precios de venta de tal manera que a mediano plazo abatiría a la mitad las importaciones de maíz amarillo”.