El presidente del Comité Directivo Estatal del Partido Acción Nacional (PAN) en Querétaro, Martín Arango García, lamentó el fallecimiento de 13 personas tras el descarrilamiento del Tren Interoceánico ocurrido en el estado de Oaxaca, y afirmó que se trata de un hecho que no debe ser minimizado ni encubierto por las autoridades.
El dirigente estatal señaló que, desde su postura, la tragedia está vinculada a decisiones tomadas desde la corrupción, al considerar que no se trata de un accidente inevitable ni de una falla técnica aislada, sino del resultado de una cadena de omisiones y malas prácticas en la planeación y ejecución de la obra ferroviaria.
“No nos vamos a quedar callados. Estos no son errores técnicos ni accidentes inevitables; son las consecuencias de que negocios familiares millonarios se convirtieron en obras públicas, construidas desde la corrupción, la opacidad y el amiguismo”, expresó el dirigente panista.
Arango García afirmó que el proyecto del Tren Interoceánico estuvo rodeado de señalamientos desde su etapa de construcción, relacionados con presuntas irregularidades en los procesos de asignación de contratos y en la supervisión de la obra.
Indicó que, a su consideración, estas condiciones derivaron en infraestructura frágil y sin controles adecuados de calidad, lo que incrementó los riesgos durante la operación del sistema ferroviario.
“El tren ya se descarriló, tal como se advirtió. La corrupción mata, y ayer esa corrupción mató a 13 personas”, declaró.
Asimismo, cuestionó que se pretenda evadir responsabilidades políticas y administrativas tras el accidente, y sostuvo que debe existir una investigación que permita esclarecer las causas del descarrilamiento y determinar a los responsables.
Finalmente, Martín Arango García manifestó su expectativa de que las autoridades judiciales actúen con independencia, para que las familias de las víctimas tengan acceso a la verdad, a la reparación integral del daño y a las indemnizaciones que correspondan conforme a la ley.




