Este sábado 14 de junio, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se prepara para presidir un controvertido desfile militar en Washington D.C., organizado con motivo del 250 aniversario de la fundación del Ejército de los Estados Unidos.
Las protestas marcaron la mayor oleada de oposición a la presidencia de Trump desde que regresó al poder en enero, y se produjeron el mismo día en que miles de militares, vehículos y aviones marcharán y sobrevolarán Washington DC en un desfile para celebrar el 250 aniversario del Ejército estadounidense.
Dicho evento coincide con el 79 cumpleaños del mandatario y el Día de la Bandera, una celebración patriótica que Trump aprovechó para compartir en sus redes sociales imágenes de miembros de la Armada junto a un avión militar, destacando lo que llamó “un gran día para América”.
El presidente republicano ha ordenado el envío de tropas de la Guardia Nacional e infantes de marina estadounidenses a Los Ángeles, una ciudad fuertemente demócrata, un despliegue que el gobernador de California, Gavin Newsom, ha impugnado ante los tribunales.
Grupos anti-Trump planearon cerca de dos mil manifestaciones de diverso tamaño en todo el país para coincidir con el desfile. Muchas se están llevando a cabo bajo el lema “No a los reyes”, afirmando que ningún individuo está por encima de la ley.
Todas las protestas “No a los reyes” previstas en Minnesota se cancelaron después de que el gobernador demócrata de Minnesota, Tim Walz, dijera que se trataba del “asesinato por motivos políticos” de un legislador demócrata y de que otro resultara herido.