Los principales negociadores comerciales de EU y China anunciaron que llegaron a un acuerdo en varios puntos conflictivos, preparando el escenario para que los líderes Donald Trump y Xi Jinping finalicen un pacto que alivie las tensiones comerciales que han sacudido los mercados globales.
Tras dos días de conversaciones en Malasia, que concluyeron este domingo, un funcionario chino afirmó que ambas partes alcanzaron un consenso preliminar sobre temas como controles de exportación, fentanilo y gravámenes al transporte marítimo.
El Secretario del Tesoro de EU, Scott Bessent, en una entrevista posterior con CBS News, dijo que la amenaza de Trump de imponer aranceles del 100 por ciento a los productos chinos “está efectivamente descartada” y esperaba que la nación asiática realice compras “sustanciales” de soya, además de ofrecer una prórroga en los controles de tierras raras.
Estados Unidos no modificará sus controles de exportación dirigidos a China, añadió.
“Por lo tanto, espero que la amenaza del 100% haya desaparecido, al igual que la amenaza de que China imponga de inmediato un régimen de control de exportaciones a nivel mundial”, dijo Bessent.
Por separado, le comentó a ABC News que creía que China retrasaría sus restricciones sobre tierras raras “durante un año mientras las reexaminan”.
Bessent anticipó un acuerdo amplio entre Trump y Xi que extendería una tregua arancelaria, resolvería diferencias sobre la venta de TikTok y mantendría el flujo de imanes de tierras raras necesarios para la producción de productos avanzados, desde semiconductores hasta motores de aviones.
Los dos líderes también planean discutir un plan de paz global, dijo, después de que Trump declarara públicamente que esperaba contar con la ayuda de Xi para resolver la guerra de Rusia en Ucrania.
Las señales alentadoras de ambas partes en las negociaciones contrastaron marcadamente con las últimas semanas, cuando el anuncio de nuevas restricciones de exportación por parte de Pekín y la amenaza recíproca de Trump de imponer nuevos aranceles exorbitantes amenazaron con sumir a las dos economías más grandes del mundo en una guerra comercial total.
El propio Trump predijo un “buen acuerdo con China” mientras hablaba con reporteros al margen de la cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático en Kuala Lumpur, diciendo que esperaba reuniones de seguimiento a nivel de líderes en China y EU
“Quieren hacer un acuerdo, y nosotros queremos hacer un acuerdo”, dijo Trump.
Aun así, los mercados observarán de cerca los detalles del acuerdo final, tras casi un año de cambios vertiginosos en las políticas comerciales y arancelarias entre EU y China.
El enviado comercial chino Li Chenggang expresó su creencia de que las partes habían alcanzado un consenso sobre el fentanilo, sugiriendo que EU podría levantar o reducir un arancel del 20 por ciento que había impuesto para presionar a Pekín a detener el flujo de químicos precursores utilizados para fabricar la droga mortal.
También dijo que las naciones abordarían las medidas de la Administración Trump para imponer tarifas de servicio portuario a los buques chinos, lo que llevó a Pekín a imponer gravámenes retaliatorios a los buques de propiedad, operación, construcción o bandera estadounidense.








