Anora se coronó como la ganadora a Mejor Película en la 97 edición de los Premios Oscar, celebrada este domingo en el Dolby Theatre.
La cinta, dirigida por Sean Baker, ha cautivado a la crítica y al público con su impactante historia sobre una stripper que, en un giro inesperado, se ve atrapada en una relación con el hijo de un multimillonario ruso. La pareja, al poco tiempo de conocerse, decide casarse, desencadenando una serie de eventos que pondrán a prueba sus emociones y su relación.
Anora, que originalmente se presentó como una producción independiente de bajo presupuesto, cosechó grandes premios, como la Palma de Oro en el Festival de Cannes y otros reconocimientos del sindicato de directores, productores y guionistas de Hollywood.
Este éxito, respaldado por su potente guion y su dirección atrevida, la posicionó como una de las favoritas para llevarse el máximo galardón en los Oscar.