QUERETALIA
EL QUERÉTARO MERCANTIL IV
Este centro comercial está ubicado en la calle de Durango, entre Chihuahua y Sonora, en la colonia Obrera, siendo inaugurado el 14 de junio de 1972 por el presidente municipal Antonio Calzada Urquiza y el gobernador Juventino Castro Sánchez, funcionando en una superficie de 1820 m2 de terreno y una construcción de 1072 m2.
Inició con seis locales y en la actualidad tiene sesenta y cinco funcionando, pasando de los inicios de tortillería, carnicería, abarrotes, verduras y medicamentos a pollerías, fruterías, barbacoa, carnitas, licuados, ropa, cocinas económicas, fondas, panaderías, abarrotes, pescados y mariscos, semillas y legumbres, cremerías y artículos de limpieza, etc…
Goza de buen alumbrado y estacionamiento, pero no tiene sistema hidráulico y el pulular de personas en estado de ebriedad representa un problema para los locatarios que abren diariamente entre las seis am y diecisiete horas.
Ya desde 1971 existían unas cuantas calles empedradas de lo que es la colonia Obrera y en uno de los locales del mercado se celebraba la misa dominical por parte de la Iglesia Católica además de impartirse la doctrina en el resto de la semana, según nos refiere Alfredo Tziu Mora.
MERCADO LÁZARO CÁRDENAS
En el año de 1989 el alcalde Braulio Guerra Malo recibió con agrado la idea del líder vitalicio de la Federación de Uniones de Comerciantes, don J. Merced Aguilar Trejo, de detonar comercialmente con la construcción de un mercado la zona de la recién estrenada colonia Lázaro Cárdenas, por lo que el edil en mención solicitó autorización a su Ayuntamiento para iniciar el proyecto y la obra, contando con el aval y el apoyo del gobernador Mariano Palacios Alcocer para que Banobras se hiciera cargo del fondeo. Al gobernador Palacios le había tocado crear e inaugurar en 1987 esa populosa colonia de clase media, por lo que vio con buenos ojos el proyecto, a grado tal que continuamente asistía a supervisarlo y finalmente lo inauguró el 26 de abril de 1991.
El citado mercado se encuentra ubicado en el circuito Lázaro Cárdenas sobre un terreno de 9572 m2 con una construcción de 2350 m2. Funcionan 112 de 126 locales, además de que en su explanada se instalan 53 tianguistas los martes y sábados.
Actualmente el mercado enfrenta la crisis de que muchos locatarios no abren regularmente, y menos a las siete am como lo indica su reglamento interior; si bien les va abren a las doce del día. Los puestos de comida nocturnos son más regulares en su funcionamiento. La inseguridad también ha permeado en el interior del mercado, presentándose varios casos de robos, cosa que desanima a los locatarios a seguir en sus respectivos giros, a pesar de que el centro comercial es espaciosos, funcional y bien cuidado por el Ayuntamiento capitalino.
EL MERCADO DE LAS FLORES
Este mercado tuvo sus orígenes en el tianguis que se ubicó desde 1938 frente al tanque del agua en La Cruz, en la antigua calzada de “Las Lágrimas”, hoy prolongación Zaragoza oriente. Uno de los fundadores de ese tianguis fue J. Natividad Bello Cancino, proveniente de Coroneo, Guanajuato, quien con su recua de mulas y burros –cargados de tierra negra para macetas, leña, carbón y fruta, llegaba hasta la barda sur del ex convento de La Cruz, en la calle de 20 de Noviembre, antigua calle de Los Cipreses, para ofrecer dicha mercancía a los queretanos que en verdad la apreciaban.
En los años cincuenta del siglo XX se incorporó al tianguis Epifanio Ortiz, oriundo de Tulancingo, Hidalgo, quien dio valor agregado al espacio ofreciendo plantas y flores, uniéndose después los vendedores de macetas provenientes de Dolores Hidalgo, Guanajuato, del estado de Hidalgo y de Xochimilco, Estado de México. Es en el año 2000 que el alcalde Rolando García Ortiz los convence de reubicarse a un lado del Panteón Municipal de la colonia Cimatario, casi al final de la avenida Luis M. Vega, donde continuaron trabajando durante catorce años a la intemperie, hasta que el munícipe Roberto Loyola Vera les construye su mercado formal, mismo que inaugura el 20 de diciembre de 2014.
Algunas familias, como los Arias de Xochimilco, prefirieron quedarse en locales establecidos alrededor del antiguo tianguis en la zona del llamado Tanque del Agua, convertido en elegante fuente en el año 1992 por el alcalde Alfonso Ballesteros Negrete. Esas familias acondicionaron como viveros sus establecimientos y son un éxito comercial, ya que crecieron tanto que era imposible reubicarlos en el mercado “De las Flores”.
La superficie del terreno en el que se asienta es de 2360.7 m2, teniendo de construcción 2235.9 contando con un muy buen estacionamiento y cancha de basquetbol. La señora Lorena Bello Cancino y el señor José Rodríguez Bello, descendientes del fundador en 1938, son de los más incansables promotores del citado mercado, bello por dentro y por fuera, funcionando con regularidad 64 locales. La organización y estructura del mercado es de 65 locales, de los cuales 64 están ocupados equitativamente en el reparto de flores, arbustos, árboles frutales, macetas y la venta de tierra. Uno de los locales está dedicado a la Virgen de Guadalupe. También cuenta con dos locales de comida fuera del mercado, el uso de sanitarios, canchas de futbol, un pequeño parque y una zona de descarga.
La autoridad municipal permitió el culto a la Virgen de Guadalupe, patrona del mismo, teniendo los locatarios como tradición hacer una peregrinación rumbo a La Congregación cada 11 de diciembre, además de oficiarse una misa en el propio mercado el día 12 del mismo mes.
El municipio se encarga de la administración del mercado, ya que los locales son concesionados, y los servicios de Agua y Electricidad son proporcionados por el municipio. El único pago que realizan los locatarios es la licencia municipal que es cada año y la manutención del lugar limpio.
Las familias que mueven la gran actividad en el mercado son originarias de Coroneo, Guanajuato, Hidalgo y CDMX, son pocas las familias cuyos orígenes son de Querétaro, pero indudablemente ya son queretanos por adopción al servirle a la sociedad en un rubro que los oriundos no explotábamos. Las flores y árboles vienen de la Ciudad de México y Morelos, ya que en esas entidades están los viveros más grandes del país. En épocas del año como los meses de octubre, noviembre y diciembre las flores son traídas desde Michoacán; en el caso de la flor de Cempasúchil y de la flor de Noche Buena son también de ese estado y no del de Guerrero como se pensaba, ya que el clima en donde este tipo de flor crece es frío y no cálido o caliente como lo es en el estado sureño.
Hay plantas y arbustos que están protegidas y controladas que deben de tener un registro y producidos en las unidades de producción, y no arrancadas de la tierra. En el caso de una planta que se llama “Pata de Elefante”, está tiene que tener su registro y una etiqueta en la maceta en donde se indique de donde viene y fue producida.
La venta de las flores es muy común, desde rosales, malvas, hasta las orquídeas y lirios que van desde los $10 pesos hasta los $5,000 pesos en el proporción a la calidad de la flor. Los arbustos, arboles, helechos y palmeras también hay diferentes precios que van desde los $300 hasta los $10,000 dependiendo el tipo, calidad y conservación.
A nivel estatal Querétaro tiene un solo un mercado de flores, y a nivel nacional sólo hay registro de seis o siete mercados dedicados a las flores y todo tipo de plantas.
Tipos de plantas y flores que manejan actualmente: