El presidente municipal de Querétaro, Luis Bernardo Nava Guerrero, reveló que se pretende ampliar el esquema de ofrecimiento de becas, para canalizar a personas en situación de calle que presenten algún tipo de problema de adicciones, y puedan solventar el tratamiento con dichos apoyos económicos en los Centros de Rehabilitación de tipo residencial.
El alcalde capitalino recordó que, durante el año 2023, se dieron diversos apoyos a través del Instituto Municipal para Prevenir Conductas de Riesgo, para este tipo de casos, que eran identificados en usuarios del Hogar de Transición Cambiando Vidas.
“Estamos fortaleciendo el programa de prevención y atención de adicciones, vamos a incrementar el monto que vamos a destinar para un tipo de becas que, este año, se ejercieron algunos apoyos de este tipo, para personas que puedan ingresar a atenderse en Centros de Rehabilitación. El tema de la atención de personas en una situación de adicciones hay que tratarlo y atenderlos debidamente. Vamos a fortalecer con mayor inversión para brindarles el apoyo económico”, sostuvo.
Particularmente, reconoció que esta estrategia surge a raíz de la tragedia ocurrida en el Centro Histórico, donde murió una mujer por causa de las lesiones provocadas por un sujeto en situación de calle, quien se presumía en primera instancia mostraba características del influjo de alguna sustancia.
Luis Bernardo Nava consideró que esto podría abonar a mejorar el clima de seguridad, pues una persona bajo los efectos de sustancias podría no ser consciente de sus actos de violencia.
Y es que enfatizó que no se puede llevar “a la fuerza” a las personas en situación de calle al Hogar de Transición, ni a algún centro de rehabilitación. Por ello, se coordinarán para sensibilizarlos y que accedan a este beneficio. Añadió que esta misma semana tendrán que definir los montos de apoyo en cada beca.
Nava Guerrero subrayó que este tipo de estrategias también podrían motivar a los Centros de Rehabilitación existentes en la capital, para buscar su proceso de regularización y acreditación de buenas prácticas, implementada desde el año pasado en la capital.
“La evolución de algunos centros, para que sean centros de rehabilitación y que sean sujetos para que nosotros podamos becar o apoyar a las personas para que puedan internarse y tratarse, sería una de las condicionantes para que podamos nosotros trabajar con alguno de los centros”, resaltó.