El director de la Agencia de Movilidad del Estado de Querétaro (AMEQ), Gerardo Cuanalo Santos, declaró que no cuentan con la capacidad legal para intervenir en la huelga que los conductores de las plataformas Uber y Didi debido a que es un conflicto directamente entre particulares; añadió que tampoco el conflicto entra en la jurisdicción de la Secretaría del Trabajo (ST) estatal para mediar en el problema.
A pesar de esto, Cuanalo Santos subrayó que la principal responsabilidad de la AMEQ es garantizar la seguridad de los usuarios, es decir, de los ciudadanos que utilizan estos servicios de repartición de comida o transporte; sin embargo, reconoció que es responsabilidad de los particulares el regular las relaciones laborales entre las empresas y sus conductores mismos que no son ni siquiera reconocidos como trabajadores sino como “socios”.
“Nosotros no tenemos realmente alcance legal para poder regular un acuerdo o un entendimiento entre los propios conductores y las empresas, es un tema de particulares y queda fuera de nuestro marco legal”, afirmó el director y añadió que la AMEQ se enfoca en supervisar las condiciones de seguridad que ofrecen estas plataformas, como la actualización periódica de la información de los conductores y los vehículos que prestan el servicio.
El director de la AMEQ también señaló que este tipo de conflictos no son exclusivos de Querétaro, sino que se han presentado en otras ciudades del país, y reiteró que la Agencia está limitada legalmente para intervenir en este tipo de asuntos. Asimismo, señaló que tampoco ha habido acercamientos por parte de los conductores quienes protestan contra la modificación de las tarifas “No han tenido acercamiento directo con nosotros, insistimos en que es un tema entre particulares que no sólo ocurren en Querétaro, hay otras ciudades del país donde también existen estos tipos de conflictos”, reconoció.
Cabe señalar que operadores de los servicios de Uber y Didi tanto del servicio de transporte como de repartición de alimentos han decidido hacer paros laborales en las aplicaciones debido al cambio de tarifas que las mismas plataformas realizaron, lo cual generó una queja por parte de los ‘socios operadores’ pues sus ganancias por viaje bajaron considerablemente, impidiendo que una jornada laboral tuviera ganancias reales.