COLUMNA INVITADA
Partido incluyente, abierto y moderno
Después de 107 días de trabajo en asambleas municipales y estatales de todo el país, así como en mesas nacionales temáticas, el pasado sábado llevamos a cabo la Asamblea Nacional del PRI.
Se trata del máximo órgano de decisión de nuestro partido, en el que más de 10 mil delegados y delegadas discutimos temas fundamentales para fijar el rumbo hacia el futuro y consolidarnos como un partido incluyente, abierto y moderno, por ello hoy he querido, estimados lectores, compartirles algunos puntos relevantes aprobados al interior de este órgano:
Además de modificar nuestros documentos básicos para dotarlos de un lenguaje de género, garantizamos la paridad en la selección de las personas que encabezarán nuestras candidaturas, para impulsar la igualdad sustantiva entre hombres y mujeres.
De igual manera aprobamos que 1 de cada 3 candidaturas sea para jóvenes, con la finalidad de que su voz sea escuchada y puedan aportar sus ideas a la construcción del México que todos anhelamos.
La figura de plurinominales surgió en una época en la que había que garantizar que todas las expresiones políticas tuvieran representación. Hoy cualquier partido tiene las posibilidades de ser competitivo y ganar en las urnas estos espacios, por ello prohibimos en nuestros estatutos que una persona que hoy es plurinominal, pueda postularse a otro espacio por la misma vía, en todo caso tendrán que salir a las calles a buscar el voto de la ciudadanía de manera directa.
Convencidos de que debemos renovarnos y adecuarnos a estos tiempos, dejamos atrás los candados para ser un partido incluyente, por lo que cualquier simpatizante preparado y competitivo podrá aspirar a representar a nuestro partido.
Atendiendo algunos de los reclamos más sentidos de la sociedad como lo son la transparencia y la rendición de cuentas, incorporamos mecanismos de vanguardia para evitar que nuestros candidatos y los funcionarios emanados de nuestras filas cometan actos de corrupción. De igual manera creamos un código de ética y una instancia al interior de nuestro partido para asegurar la congruencia de todos nuestros actos con los principios que nos dieron vida y castigar cualquier acto de corrupción.
Vamos a dignificar el campo y a implementar una agenda urbana que contemple el derecho a la ciudad como derecho humano, para garantizar un crecimiento ordenado y bien planeado.
De igual manera aprobamos el fomento e inclusión de los grupos más desfavorecidos, incluyendo a las personas con discapacidad y reconociendo de manera transversal los derechos de los pueblos indígenas, para asegurar su participación política y que su voz sea escuchada.
Tras nuestra Asamblea, nos convertimos en el primer partido en hacer un reconocimiento pleno en sus documentos básicos a los derechos de la comunidad lésbico-gay.
Estos son algunos de los cambios que las y los delegados incluimos en nuestros documentos básicos, convencidos de que tal como ocurrió en el siglo 20, el PRI será el protagonista de la consolidación de México como un país próspero y democrático en este siglo 21, como lo dijo nuestro presidente Enrique Ochoa, manteniendo vigentes los valores de libertad, democracia, justicia social y soberanía.