ENERGÍA Y MEDIO AMBIENTE
Hace ya 4 meses, y para ser preciso el 3 de marzo, se celebró el Día Mundial de la Vida Silvestre. Y seguramente para muchos no signifique nada en absoluto, sin embargo, la vida silvestre compuesta por animales salvajes y las plantas silvestres, contribuyen a los aspectos ecológicos, genéticos, sociales, económicos, científicos, educativos, culturales, recreativos y estéticos del bienestar humano y el desarrollo sostenible.
Este Día Mundial de la Vida Silvestre, abre la oportunidad de repensar sobre la belleza y la variedad de la flora y la fauna salvajes, así como de crear conciencia acerca de la multitud de beneficios que la conservación de estas formas de vida tiene para la humanidad. Pero sobre todo es una franca invitación a reflexionar la necesidad urgente de combatir los delitos contra el medio ambiente y la disminución de especies causada por la actividad humana, que acarrean consecuencias negativas de gran alcance en el ámbito económico, medioambiental y social. Este es el motivo por el cual el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 15 se centra en detener la pérdida de biodiversidad.
Históricamente, hemos dependido de la constante interacción e interrelación entre todos los elementos de la biosfera para todas nuestras necesidades: el aire que respiramos, los alimentos que comemos, la energía que usamos y los materiales que necesitamos para todos los propósitos. Sin embargo, las actividades humanas insostenibles y la sobreexplotación de las especies y los recursos naturales están poniendo en peligro la biodiversidad del mundo. Casi una cuarta parte de todas las especies corren actualmente el riesgo de extinguirse en las próximas décadas.
Lo anterior nos remite irremediablemente a pensar que en Querétaro y particularmente, la zona metropolitana, el desarrollo inmobiliario ha sido el principal agente destructor, alterador e insostenible para la vida silvestre y como dirían los ciudadanos, “ya ni garambullos dejaron”. Ahora recientemente, el denominado proyecto de fraccionamiento Tierra Noble, se ha convertido en el principal y emblemático proyecto, que aunque trate de encubrirlo con un discurso publicitario verde y apele a que ayuda a los pobres ejidatarios, atenta de manera directa contra la vida silvestre, la legalidad y la calidad de vida de los ciudadanos de la capital, en tanto que: no le importa que esos terrenos se encuentren en un área natural protegida, que tiene un conjunto de valores ambientales significativos, como la infiltración de agua al acuífero, la captura de CO2, la remoción de contaminantes, el control de inundaciones y otros más; no cuenta con cambio de uso del suelo habitacional, tampoco con permisos para construir y mucho menos con la autorización de impacto ambiental.
La semana pasada pago un artículo publicitario en el periódico Noticias, en el cual, empuja por delante a los ejidatarios, a los cuales, se dice que dicho proyecto les traerá beneficios económicos ya que sus tierras son las que se están ofertando, mediante una formula de asociación entre una empresa privada y el ejido. Sin detenerse a pensar que, en la historia reciente de urbanización en Querétaro, los únicos que se han enriquecido con la venta de terrenos son las empresas inmobiliarias, y en este caso, a pesar de que ya llevan vendidos muchos lotes a personas ingenuas principalmente de la ciudad de México, a los ejidatarios no les han repartido ni un centavo.
Lo que si exhiben es una falta de ética en general y ambiental en particular, pues no reparan en destruir la vida silvestre de ese sitio, no les preocupa el impacto ambiental, ni para sus clientes, ni mucho menos para los ciudadanos queretanos. Estamos saliendo apenas de un gran problema epidemiológico que, en su origen, fue por quebrantar el equilibrio entre ser humano y la naturaleza, allí tenemos el caso en aras de la avaricia económica de este proyecto inmobiliario.
Pero cabe hacer hincapié, en que ya ha entrado en vigor el tratado de libre comercio T-MEC y uno de sus ejes centrales en materia ambiental es la aplicación de la ley o justicia ambiental y por otra parte, la conservación de la biodiversidad. Aún es prematuro decirlo, pero de continuar insistiendo en llevar a cabo tal aberración de fraccionamiento, podría también ventilarse como un caso de ilegalidad y contravención ambiental en el organismo del Consejo de la CCA que conforman los tres países del tratado sobre el tema ambiental.
Dicen que cuando alguien se siente acorralado, lanza amenazas y así, ya empezaron las amenazas anónimas telefónicas en contra la ambientalista América Vizcaíno, a raíz de la denuncia interpuesta en PROFECO por el posible acto de fraude en la compraventa de esos lotes, que no cuentan con los permisos ya mencionados para construir.
Mientras nos quedamos con la idea de que el Día Mundial de la Vida Silvestre se celebrará este año 2020 bajo el lema “Garantizar el sostenimiento de la vida en la Tierra”, abarcando todas las especies de animales y plantas silvestres como componentes clave de la biodiversidad mundial.