ENERGÍA Y MEDIO AMBIENTE
Se estima (SENER), que para todo México se requiere de una inversión de 600 millones de dólares para los siguientes 25 años para lograr la transición energética y sobre todo reducir la pobreza energética de 11 millones de mexicanos. La estrategia es una diversificación de fuentes, como la solar, eólica, geotérmica, biomasa, mareomotriz y otras.
Pero una de las estrategias centrales y prioritaria, debe basarse en la “energía distribuida” que pretende que se genere en un lugar y se consuma lo más cercano posible. De ahí ha surgido el concepto de prosumidores, pero debemos desplegar un abanico amplio y no sólo ver a los pequeños, sino hay que incrementar el tope de 500Kws a 1,000 Kws para energía distribuida, para que la pequeña y mediana empresa, que junto con la micro, que son las que sostienen el empleo en México, se puedan beneficiar, además, también hoy se precisa de voltear a ver, que los municipios deban invertir en energías, tanto para su abastecimiento, como para complementar el déficit en sus ciudades.
Y aunque el peso mayor lo lleva el gobierno en la transición energética, con la apertura del mercado, que aún se encuentra en proceso de crecimiento y falta mayor inversión privada, se estima que la demanda de energías renovables crecerá anualmente en 3.1% y que en 15 años, generará alrededor de 200 mil empleos.
A fin de acelerar el paso en la transición, se observa como necesario, distribuir las competencias a los Estados, para lograr más promoción e inversión local, ya que el gobierno federal en la actualidad no tiene la capacidad de cubrir a cabalidad todo el territorio. En este sentido, se recomienda dejar a los Estados la competencia de la energía distribuida.
Por otra parte, hacia el interior de las entidades federativas, urge construir el marco jurídico e institucional (leyes y organismos gubernamentales) que sirvan para regular y promover las energías renovables. En este sentido, en el caso del Estado de Querétaro, se pued4e pensar en lo siguiente:
• Crear la Agencia Estatal de Energía, ya que la Ley de Cambio Climático del Estado ya le encomendó la obligación de nombrar al Comisionado
• Proceder a una pequeña reforma dentro de ésta Ley y en el capítulo de Energías, a introducir un mecanismo de regulación consistente en la figura de Impacto Energético para exigir a la industria que al menos el 10% de su energía provenga de fuentes renovables
• Y ahora que se está revisando el Código Urbano, sería oportuno considerar que los nuevos fraccionamientos contarán con energías renovables.
Estos tres elementos, en verdad constituyen un acelerador para transitar energéticamente en Querétaro, y para sostener el crecimiento económico y la competitividad, al mismo tiempo que se combatiría la pobreza energética.
Estamos justo en el momento para arrancar y es que contamos con varias ventajas, entre ellas el capital humano que se está formando en varias universidades como la UTEQ, UAQ, Mondragón, además de aquellos provenientes de los centros de investigación.
Recientemente se anunció la creación del Clúster de Energía del Bajío y creemos que debe ser un detonador para captar inversiones, estimular el desarrollo tecnológico, impulsar la eficiencia energética y al final de cuentas transitar a las energía renovables.