ENERGÍA Y MEDIO AMBIENTE
Recientemente varios especialistas en medio ambiente y energía participaron en el Foro “Contaminación Atmosférica y Salud Pública en el Valle de México” para discutir los impactos negativos por el uso de combustóleo en la Central Termoeléctrica de Tula, en Hidalgo.
En voz de los especialistas, la zona centro es un claro ejemplo de los efectos negativos del uso de combustóleo para la generación de electricidad, ya que sus emisiones contaminantes se dispersan a toda la Zona Metropolitana del Valle de México afectando no sólo la calidad del aire, sino con efectos irreversibles a la salud de los más de 20 millones de habitantes en la región, lo cual cobra relevancia en tiempos del COVID-19.
Se ha dicho que el combustóleo empleado en la Termoeléctrica de Tula tiene un porcentaje de entre 3% y 4.2% de azufre, por lo que viola la NOM 016 de la Comisión Reguladora de Energía que establece que en las zonas metropolitanas y en corredores industriales prioritarios, el combustóleo no podrá tener más del 2% de azufre. Así mismo otra especialista se refirió a que los efectos de las partículas PM2.5, que se desprenden por la quema de combustóleo, como uno de los contaminantes, tiene un claro riesgo a la salud.
El académico Adolfo Hernández, investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), presentó una modelación sobre los consumos de combustible por parte de la Central Termoeléctrica Francisco Pérez Ríos, propiedad de la CFE. En el estudio se compararon escenarios de uso de combustóleo (con 3.5% y 2% de azufre) y gas natural. Señaló que el uso de gas natural reduciría las emisiones de partículas PM2.5 y PM10, mejorando considerablemente la calidad del aire de la ZMVM.
Por último, se informó sobre un punto de acuerdo, previamente inscrito en la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, que se presentará en la Comisión de Energía y se espera sea discutido y aprobado. Dicho acuerdo ha sido firmado, hasta el momento por veintidós senadores.
Pero recordemos las cifras y promesas de años anteriores: La Comisión Federal de Electricidad (CFE) se comprometió a reducir en 90% el uso de combustóleo ―un hidrocarburo con altos índices de contaminación― para producir energía, y en el primer trimestre de 2016 duplicó su consumo.
No obstante en el 2012 la CFE informó que usaba 201,000 barriles de combustóleo diarios y que en 2018 reduciría esta cantidad hasta 20,000 barriles al día, como parte de una estrategia de sustitución de hidrocarburos contaminantes por energías más limpias, como el gas natural.
Para finales del 2019 (11 de Diciembre, 2019, Forbes) la CFE declaro lo siguiente: CFE dijo que puede utilizar combustóleo “sin ningún problema” en todas aquellas centrales termoeléctricas que han hecho el cambio a gas natural, pero no sería energía limpia, y reconoció que tendrán que instalar sistemas para capturar la contaminación que produce el combustóleo, superada con el uso de gas natural.
“Necesitamos buen precio, porque lo que necesitamos es tener recursos para tener equipos anticontaminantes que nos ayuden a preservar el ambiente”, agregó el coordinador de generación termoeléctrica de CFE.
El dilema ahora es entre combustibles menos contaminantes (gas natural) y el costo barato de los combustibles contaminantes (combustóleo), cada uno tiene sus consecuencias, sobre todo en el contexto de la pandemia. Usted ¿cuál elegiría?