El rapero Kanye West hizo una aparición en el tribunal federal de Nueva York el viernes, durante el día 23 del juicio penal por tráfico sexual y crimen organizado contra el magnate musical Sean “Diddy” Combs.
Vestido completamente de blanco y con gafas de sol oscuras, West, de 48 años, fue visto entrando a la corte acompañado de Christian Combs, hijo de Combs, y dos guardias de seguridad, según Page Six y TMZ.
Al ser cuestionado por reporteros sobre si estaba ahí para apoyar a “Diddy”, West respondió brevemente: “Sí”. No respondió, sin embargo, si testificará en el caso.
Fuentes presentes en la corte señalaron que West pasó por los mismos controles de seguridad que el resto de los asistentes, sin ningún tipo de trato preferencial.
Fue recibido por Xavier Donaldson, miembro del equipo legal de Combs, y ubicado en el área de desbordamiento, donde observó la sesión junto con su equipo de seguridad.
La presencia de West marca un giro inesperado en el caso, pues hasta ahora ningún otro famoso había acudido públicamente a apoyar al fundador de Bad Boy Records, quien ha enfrentado un aislamiento progresivo desde los allanamientos a sus propiedades en 2024.
La esposa de West, Bianca Censori, no lo acompañó en esta ocasión, a pesar de haber sido vista junto a él la noche anterior en la ciudad de Nueva York.
Combs, de 55 años, permanece encarcelado sin derecho a fianza y se ha declarado no culpable de los cargos, que incluyen tráfico sexual y asociación delictuosa. De ser hallado culpable, podría enfrentar hasta cadena perpetua.
Los fiscales alegan que Combs utilizó la violencia, amenazas y una red de empleados y asociados para controlar y abusar de mujeres durante dos décadas.
Sus abogados han dicho al jurado en el tribunal federal de Manhattan que, aunque hubo violencia doméstica en sus relaciones, todo lo que hizo sexualmente fue consensuado.
