En menos de una semana, la 4T amarró la supremacía.
Primero fue el Senado y ayer, la Cámara de Diputados aprobó la reforma que blinda las modificaciones constitucionales y la envió anoche a los Congresos locales para su aprobación.
La nueva ley busca darle vía libre a la reforma judicial e impedir en definitiva que la Suprema Corte la frene.
En un Palacio Legislativo custodiado por elementos de seguridad ante la amenaza de manifestaciones del Poder Judicial, Morena y sus aliados avalaron las modificaciones a los artículos 105 y 107 constitucionales que invalidan las controversias, las acciones de inconstitucionalidad y los juicios de amparo como mecanismos para impugnar reformas y adiciones a la Constitución.
La reforma, aprobada sin cambios con 343 votos a favor y 129 en contra, contiene también un artículo segundo transitorio que establece que los asuntos que se encuentren en trámite, como la reforma judicial, deberán resolverse conforme a las disposiciones contenidas en el presente decreto.
La discusión, que se alargó por poco más de 10 horas, comenzó con la presentación de tres mociones suspensivas de la Oposición, que argumentó violaciones al proceso legislativo en la dictaminación de la minuta y que finalmente fueron rechazadas por la mayoría.
El presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, el morenista Leonel Godoy, reconoció que en el dictamen no había ninguna adición o argumento de la Oposición y además aprovechó su intervención para lanzarse en contra de la Corte.
Dijo que las modificaciones buscan dar certeza y claridad para reafirmar la improcedencia de los medios de control constitucional como las acciones de inconstitucionalidad, las controversias constitucionales y los amparos cuando tengan por objeto controvertir reformas y adiciones a la Constitución.
Vestidos de negro y portando unas velas, los panistas subieron a tribuna acompañado a Annia Gómez, integrante de su bancada, y mostraron “lápidas” con la leyenda: “Descanse en paz Poder Judicial. Murió víctima del autoritarismo de Morena”.
El emecista Sergio Gil reprochó la prisa para aprobar la reforma, la cual atribuyó a que la mayoría quiere ganarle la partida a la Suprema Corte, que prevé discutir el proyecto de sentencia del Ministro Juan Luis González Alcántara el próximo martes.
“Quieren ganarle a una Corte que saben que tiene la razón, a un pleno de Ministros que va a sesionar el martes y saben que su reforma es anticonstitucional y que la Constitución sí puede ser revisada para no caer en violación de derechos”, dijo.
El presidente de la Mesa Directiva, el morenista Sergio Gutiérrez Luna, citó a sesión para hoy a las 17:00 horas, a la espera de que esta madrugada y durante la mañana, al menos 17 Congresos locales aprueben la ley y se oficialice la declaratoria de validez de la reforma constitucional.
Anoche, los Congresos de Zacatecas, Tabasco, Sonora, Quintana Roo y la CDMX ya habían aprobado la reforma.