El presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CANACO) en el estado, Fabián Octavio Camacho Arredondo, reveló que que para que puedan regresar las personas adutos mayores a trabajar como empacadores de supermercados conocidos como “cerillitos”, se les tendría que solicitar un comprobante de que han sido vacunados contra la pandemia de COVID-19; como parte de una instrucción federal de las asociaciones de supermercados y tiendas de autoservicio.
“Es un tema importante, que se pueda dar de esta manera. Es particularmente en los supermercados, donde normalmente se desarrollaba esta actividad comercial. De acuerdo a esta comunicación que la asociación de supermercados ha girado, estará existiendo un mecanismo para que puedan reincorporarse a esta actividad”, concluyó.
Cabe resaltar que desde que comenzó la pandemia, las organizaciones en la materia suspendieron los permisos a personas de la tercera edad para apoyar en estas actividades, por considerarse un riesgo de contagio para este sector.
Por otro lado, luego de que en días pasados algunos comerciantes establecidos del Centro Histórico de Querétaro se manifestaran cerrando andadores y calles en contra del incremento del ambulantaje, Camacho Arredondo lamentó la falta de control por parte de las autoridades municipales.
Resaltó que existen más de 3 mil negocios regularizados en el primer cuadro de la ciudad, mismos que han mostrado su molestia por al competencia desleal del comercio en vía pública, pues en muchas ocasiones venden los mismos productos.
“Es reflejo de falta de controles administrativos, tanto de espacios como de los trámites. Es ahí donde nosotros como comercio organizado daremos muy puntual énfasis para hacer un llamado a la autoridad, que es a quien compete tener este ejercicio”.
Finalmente, el empresario informó que durante la temporada vacacional de Semana Santa, se logró recuperar una derrama económica de 420 millones de pesos; lo cual representa el 50 por ciento de una temporada normal sin pandemia, como la registrada en 2019.
Reconoció que los rubros que fueron los menos favorecidos en el marco de este periodo fueron el sector restaurantero y el turístico; mismos que registraron pérdidas de entre 40 y 60 por ciento de sus ventas. No obstante, confió en que el Escenario B ampliado hasta el 25 de abril pueda seguir abonando a frenar los cierres definitivos de los comercios.