EL CRISTALAZO
Comencemos con catedralicias, concisas, consumadas citas citables:
–“¡Coño, carajo, caballero”: Cocodrilo.
— “¿Cuantas cosas clausuró Covid”: canto colectivo.
Continuemos cautelosos, con cuidado, cuidadito, cantaba caderona.
Convivir sin convivencia cercana conviene contra Coronavirus. Cada cual con casa cerrada, con cara cubierta, cascada con cloro (catarata, claro), comida comprada, cocinada, calculada, consume contadas calorías, caldos calientes, caramelos, casi censurados; con carbohidratos crecen coronitas, come con cuidado; camarones con cebolla, calabaza capeada, cubre culo con calzón, calzas cómodas, casimir, crolán, cro, cro… compra cecina con col compañera, consigue Coca-Cola.
Considera con calma cuántos caminos convienen cerrados.
¿Circular con carcacha?, casi caduco.
Coche (¿Cadillac, Corolla, Compass?) con candado.
Camioneta (¿CRV?) con cierre completo.
Carro (¿Coupé?) cancelado, confirma Claudia con certeza convencida.
Conectar con Constituyentes, Consulado, Camarones, Candelaria, Cuatro Caminos, concluye con cancelación y cuchillo cebollero con cuaresmeño. Con cuántos contagios contribuye cada caminante, cada comensal con concha, ¿calcularíamos con certeza casos comunes?
Compremos computadoras, convoquemos catedráticos, cerebros comprometidos, catecúmenos catequizadores, construyamos cercos; cemento, cercadura; condenemos conspiradores, conspiracionistas, crueles cambujos contra cuidados cibernéticos. Costras con cal. Con cierta comicidad contabilizan ciudadanos comprometidos, cuentan con canicas, con cuerdas como Caldwell; con cálculos coloquiales comentan contra cubiertos cadáveres congelados, camaradas con careta, con cachaza.
Cuando culminen cómodos calculistas, ¿con cuánta certeza, con cuanta claridad cubriremos con cobijas cuerpos corrompidos, coronados con Covid? Coronas con claveles calientan contaminación. Ciervos cruzan Culiacán. Conviene cerrar Calpulalpan; clausurar Comitán, Cuernavaca, Contreras, Cacahuamiulpa.
Columbramos colosal cefalea. Calamidad carente. Centavos correlones. Cuándo culmine cuarentena, comprobaremos cómo construyeron con caliginosa caligrafía. Calificaremos con calidad. Casi como compasivos combatientes.
Cambiaremos con clausura. Compartiremos correspondencia.
Creemos, confiamos. Contractura convoca calistenia curativa. Cadera cansada con cómodos cojines. Crujen coxis, calcáneo, cúbito.
Cabeza colmada con cuadernos, con Camus, Confabulario, Cardenal, Casiodoro, Clavell, Curzio, Cortázar, Cervantes, Catulo, Cicerón, Camoens, Cioran, cummigns ¿cuántos caben con cuidado? Compadécete, Carlos. Comprende.
Comercio continental cretácico cae con campanadas caóticas, cálculos y crujidos catastróficos contra combustibles. Compañía cardenista come caca con caprichos cavernarios. Cacahuateros, colosales compromisos. Cadavérico Cantarell, caímos con él.
¡Cárdenas, Cárdenas!, cómo culminó cruzada, con crucifixión corporativa, con carburantes calcinados; compradores cancelados. Cálculos cómicos.
Cuando Cárdenas comprometió compañías caradura, creímos conquistar cielos completos. ¡Cuánta complejidad, crédulos crónicos! Cayeron castillos, cavamos cavernas con cuidado, convinimos cautelosos, caímos cuando corrupción completa carcomió casi todo. ¿Cierto?
¿Cancelamos conducta corrupta? Claro, Cándido, ¿Cómo crees? ¿Conoces conferencias comparsa?
Cada comparecencia contiene comodines comodones con catecismo confirmado, con cara contrita. Cuando cobran, cuestionan confundidos, colocan conveniente cataplasma, convocan condena conservadora.
–¡Conservadores, corruptos, cacos!, cooperan cardenales, camarlengos, camaleones convocados, caducos cibernéticos contra conspiradores coludidos; camarilla catalogada con catalepsia concomitante.
Contrarrevolucionarios, clamaba cubano con cigarro. Cachorros, comandante, conservadores, califican contra contemporáneos cronistas. ¿Comprendes, Ciro? ¿Captas, colega?
Conocemos complicaciones como coágulos completos.
Clínicas congestionadas, cuidados complejos, consistentes, casi colmados.
–Consejas conservadoras. Canarios cantores. Cochinos con cuerda. Cerdos capitalistas. ¡Cálmate, cavernícola!
¿Cómo cumplir cuando con cuchillo corretean, cazan cuidadores; cucan cirujanos con cubetadas con cloro calle abajo? Cuatro corceles, cuatro caballos; cinco con certeza. Contumacia confirma clima con cédula.
–Cuentistas, canallas, convocan costumbre ceromática. Cesará crisis cuando Coronavirus cumpla ciclo. ¿Cuál ciclo? Cada cual crea, cree convicciones consistentes. Conciencia crea credo, conduce catilinaria.
Cuídate, convive, conserva casa. Cónyuges cuidan convivencia. ¡Cierra con cincos! ¡Cuádralo con cuatros! C2PR. Cada cámara con calma. Cada cuadro con caballo. Cenobitas, cartujos clausurados, ceniceros colmados, Cubas con Cacique, cementerios como colmenas, canta, canta cigarra; cubre cejas con carbón, corta cabellera casquete corto. ¿Comprarías cuchillos, cazuelas, cojines? Cancela comerciales. Come calamares.
Cabe comprimir curva contagiosa, calmarla, cosa conveniente. ¿Cuándo? Cifra confusa. Cuántas cabezas coinciden. Cada cabeza crea cábala, cantidad, cacareo con cigoto cualquiera.
Celulares constantes cubren ciberespacio, comunicación cacatúa.
Columnistas, comentaristas, colman cuota canalla, comenta comendador.
Cortesanos, cómplices, convencidos con creencias compradas, cantan coros convenencieros. Conocen cartapacios con credenciales contestatarias.
Convocan conocer conjurados, conspirando contra concierto colectivo. ¡Cuelguen conservadores!, ¡construyan cadalso!, ¡calcinen concordia!, ¡califiquen conjurados!, ¡confronten canales!, ¡comprometan calidades! Cornetas con corinto, carmín con carretera. Convenencieros calumnian con credencial. Calumnistas contra columnistas. Copérnico contaba cuerpos celestiales. Cuvier completaba cálculos. Cuevas cava, con ciclos comprensibles, contra contestones. Como cosa casual, convocan contra colegas cuya corta convicción calamitosa causa conservadurismo.
Clarinada comprometedora, conducta contenciosa, combate camorrero, coima con crédito (¿cerdito?). Con cierta condescendencia clavan los clavos. Cruces contra conservadores. Calificación caduca, claramente confusa, carencia cincuentona, casa con cimiento caído
¿Cauterizar cortes con cuchilla? Complicado.
Controlar círculos celestiales con calumnias como cerro con cuesta, combatir con comediantes crisis comunitarias. Cruel conformismo ¿Como comprender? Convocar cacerías, crear conjuras con columpio.
¿Calentura?
Caminaremos calzados con cueros calcinados. Cada caso, cada corrección, cada congoja. Cuando contemos y cantemos, cada cual calificará. Clío clasifica cartapacios computarizados, certeros. Calibra con cautela.
Caen calificaciones como cartas, como castillitos celestiales. Constriñen casas cambiarias, cierran congales, consultorios, cenadurías, cafetines, casas con concubinas; calvinistas confirmadamente conservadores combinan circunscripciones, caen campanarios, ceden carretones con crudo, cortan cartera de colaboradores calladitos, capan cochinos con cola corta, confiscan, coaccionan, compran cachitos.
Con certeza colmilluda casi conducta condal, caciquil, coloco cadena contra colaboradores. ¿Cobrar?, cosa contrapuesta. “cáite cadáver”. Calavera catatónica.
Culminará cuarentena. Catarsis convertida, corpúsculos confabulados, crepúsculos con calma cenicienta.
Convencidos contemplaremos cómo cambiamos cada cosa.