PLAZA DE ARMAS
- El gobernador endulza la crisis del Estado
- Grandes capos han vivido y operado aquí
- Murió Pérez Landín, el rey del calendario
- Será costoso para PAN proteger a Correa
¿Es o se pasa?: Sabino
Otros datos.
Como los políticos de antes, el gobernador Francisco Domínguez Servién trata de borrar de golpe un grave asunto que es tema de mesa en los hogares de la mayoría de los queretanos: La presencia cada vez más notoria del crimen organizado en la entidad.
“A los ojos de los queretanos aquí trabajamos de forma coordinada y no tenemos nosotros indicios de que haya crimen organizado en el estado de Querétaro” soltó campechanamente al salir de la Séptima Reunión Ordinaria del Consejo Estatal de Seguridad, en la que estuvo acompañado por los hermanos Granados Torres y el fiscal Alejandro Echeverría Cornejo. Sí, los responsables de la crisis de inseguridad que durante 2019 golpeó como nunca nuestra zona metropolitana.
Enumeremos algunos casos registrados el año pasado que, desde el punto de vista de este armero, muestran “indicios” de presencia del crimen organizado en el estado.
1.- El asesinato del ex comandante antisecuestros Juan Rincón, afuera de su restaurante en el municipio de Huimilpan en febrero.
2.- Por esos días, fue ejecutado en Nuevo San Isidro el ex mando policiaco Julio César Segura. A él se le vinculó con el crimen de otro policía en Pedro Escobedo.
3.- El empresario Juan Carlos Fontanell, que había escapado a un atentado y fue asesinado en su casa de Tejeda por sujetos armados.
4.- Un hombre que dejaba a su hijo en el colegio, fue muerto con arma de fuego en el Callejón de La Saca, a unos metros de Paseo Constituyentes, en el municipio de Corregidora. Esto en agosto.
5.- Ese mismo mes, un hombre descendió de una camioneta Porsche en la Farmacia del Ahorro de Centro Sur, fue asesinado. Ya en el interior del negocio, indicaron testigos, un sujeto descargó su arma al menos en cuatro ocasiones, en la cabeza y el pecho del hoy occiso.
6.- Antes de que concluyera agosto, un hombre que estaba en la terraza del Starbucks del centro comercial Paseo Quintana, fue ejecutado a plena luz del día frente a los clientes del lugar.
7.- En Ceja de Bravo, Huimilpan, fueron localizados dos cuerpos al interior de una camioneta. Ambos tenían el tiro de gracia.
8.- En esa misma comunidad, fueron asesinados dos policías que participaban en un operativo contra un presunto narcotraficante, quien los recibió a balazos.
9.- Dos personas, entre ellas un menor de edad, fueron asesinados en Bravo, municipio de Corregidora, cuando un comando armado incursionó en la zona para dejar una narcomanta y hacer detonaciones contra un negocio de la comunidad.
10.- Un comando armado intenta liberar a un detenido en Paseo Querétaro. La balacera continúa hasta la intersección de 5 de Febrero y Bernardo Quintana.
Esta decena es solamente un recuento de los múltiples crímenes que a diario se registran en Querétaro.
No podemos olvidar la detención de Ángel Humberto Chávez Gastelum, un importante narcotraficante que cenaba plácidamente en el restaurante Mochomos de Bernardo Quintana. Ahí, efectivos de la Interpol lo aprehendieron junto con su hijo Alonso Chávez. El hombre coordinaba el trasiego de cocaína desde Colombia para el cártel de Sinaloa y vivía en El Campanario. Era ampliamente conocido en círculos sociales y famoso por las jugosas propinas que dejaba a meseros de los mejores comederos de Querétaro.
Y así podemos seguir con historias de narcos que han vivido y operado aquí, como Héctor Beltrán Leyva “El Hache”.
O las narcomantas que el cártel Jalisco Nueva Generación y el de Santa Rosa de Lima han colgado en lugares públicos.
Y qué decir de la presencia de dinero sucio en el fútbol queretano.
Tampoco podemos obviar los reportes oficiales que señalan a nuestra entidad como uno de los principales destinos para lavar dinero.
Mucho menos ignorar a las familias de estos criminales, que han llegado a vivir a los fraccionamientos más lujosos del estado, con sus camionetas repletas de escoltas. No.
Pero si el gobernador dice que no hay presencia del crimen organizado en el estado, será por algo.
Quizá mis datos –los de los queretanos- están equivocados.
Somos nada.
-OÍDO EN EL 1810-
Michoacano.
Se acuerdan de Jesús Cancino, El Apá de Michoacán, que fue baleado cuando esperaba a su dentista afuera de un consultorio por los rumbos de Pueblo Nuevo, Corregidora. El mismo que fue trasladado por su familia a Morelia, tras pasar varios días hospitalizado en el Ángeles de Querétaro, ante la pasividad de la Fiscalía. Sí, el que fue ejecutado en tierras purépechas en el hospital donde lo atendían.
Bueno, ese también era un narcazo.
-¡PREEEPAREN!-
Personaje.
Murió otro hombre ligado a la queretanidad: Roberto Pérez Landín, creador del Museo del Calendario, un editor de tradición y reconocido mecenas cultural.
Su legado para Querétaro y México está en innumerables calendarios publicados por décadas y en la casona de Madero en donde reunió los mejores.
Descanse en paz.
-¡AAAPUNTEN!-
De vuelta.
Que ya regresó a México el ex dirigente estatal de Morena, Carlos Peñafiel Soto… pero sólo por unos días. El ahora representantes de nuestro país ante la República Dominicana vino a la reunión anual de embajadores y cónsules generales.
¡Ah, bueno!
-¡FUEGO!-
Correazo.
Muy caras le pueden costar al PAN las corruptelas detectadas por la Entidad Superior de Fiscalización en el Municipio de Querétaro, sobre todo porque el presunto responsable es ni más ni menos que el presidente del comité de ese partido en la capital.
¡Porca miseria!