ENERGÍA Y MEDIO AMBIENTE
El pasado viernes 30 de noviembre, se registraron dos acciones relevantes, ya que por una parte hacia el mediodía se realizó la instalación de la Comisión Estatal de Cambio Climático y por la tarde, se llevó a cabo el evento de Friday for Future, que cada último viernes de mes afuera de palacio de Gobierno, jóvenes sostienen como una forma de concienciación, difusión, exigencia y protesta en torno al cambio climático. Los dos eventos, podríamos decir, compartieron el espacio público de plaza de armas, ambos trataron el urgente desafío climático, gobierno y sociedad dicen estar llevando acciones para combatirlo, las partes reconocen la necesidad, urgencia, y los riesgos de no actuar.
Entonces ¿por qué no dialogar? Cabe mencionar, que una de las propiedades emergentes del cambio climático es la convergencia social, política, económica, ambiental y cultural. Pero ello, implica no sólo entender que convergemos sino que lo más destacado, es la acción colectiva (conjunta). Aun así, estamos parados en la primera etapa de la convergencia, en donde se produce por hoy, una relación inversa, entre la acción gubernamental y la acción social, lo cual permite contrastar si una situación como ésta, tiende a reducirse con el tiempo. No obstante, todos sin excepción tenemos ya poco tiempo para revertir el cambio climático, por ello, es necesario medir la velocidad de convergencia, de manera que cuanto mayor sea la articulación institución-sociedad, mayor será la velocidad a la que convergemos.
Ahora bien, para lograr la aceleración, lo primero que debemos hacer, es reducir progresivamente la disparidad en cuanto a cantidad de programas, para pasar enseguida a reducir la brecha en el ámbito de metas y acciones. Para finalmente, mezclar recursos humanos, técnicos, científicos, legislativos, económicos y éticos bajo una óptica colectiva, y una metodología que evalué los avances, permita medirlos y re-dirigirlos para alcanzar los objetivos en el plazo fijado. Se antoja complejo, pero no hay otra salida a la ecuación climática, todos vamos en el mismo barco y no hay planeta “B”.
Bastante álgido se ha visto la agenda de organismos empresariales, acciones institucionales y el ya permanente quehacer de los activistas climáticos de la ola global de “Friday for Future” en el estado.
Ahora, la convergencia es la moneda de cambio, es la clave de la comunicación, es otras palabras la condición necesaria, que le imprimirá velocidad y le dará una condición satisfactoria.
¿Para cuándo nos reunimos?