La luna de miel entre los concesionarios del transporte público en Querétaro y el gobernador Francisco Domínguez parece haber llegado a su fin. Y es que luego de la rechifla que se llevó el mandatario en su visita al barrio bravo de Menchaca por el mal servicio de Qrobus delante de sus alcaldes y el Senador Mauricio Kuri, el mandatario estatal adelantó que los obligará a rentar cien unidades “En buenas condiciones” para mitigar la demanda en la zona metropolitana y amagó que de no hacerlo, les quitará las concesiones.
Muy lejos quedaron los discursos de campaña en donde empoderaba a los concesionarios para que hicieran sentir su fuerza “Poniendo patas pa´bajo a la ciudad”. Francisco Domínguez argumentó que la presión y la demanda de los gobernados es mucha y por ello -dice- no se puede esperar a que lleguen los nuevos camiones.
El mandatario estatal dijo en entrevista con reporteros que los cien camiones que pagarán los concesionarios habrán de distribuirse en las 32 rutas que según el Instituto Querétaro del Transporte, son las más saturadas “Y no es una pregunta, los rentan o entonces empiezo yo a tomar otro tipo de medidas con ellos; esto no es un juego, es una demanda del usuario”.
Ahondando en las especificaciones que habrán de cubrir los camiones arrendados, Domínguez Servién acotó que deberán tener una longitud mínima de 12 metros y estar en buenas condiciones para prestar el servicio. Al señalar que los empresarios del transporte tienen la viabilidad financiera para pagar la renta, comentó que las nuevas unidades llegarían en abril “Yo hice dos telefonazos, me dicen que sí me van a apoyar, entonces esto quiere decir que financieramente sí lo pueden hacer y tendrían que estar rentados hasta que lleguen los 100 nuevos”, concluyó.
POR: FERNANDO VENEGAS RAMÍREZ