TERTULIA
P. Luis Martin Hernandez
El Padre Luis Martin Hernández, nacido en España, llego a tierras Queretanas en 1913, para cumplir el sueño de toda su vida… brindar formación académica, espiritual y pastoral a la mujer queretana al fundar el Instituto de las Misioneras Marianas.
En pocas palabras, la vida y el legado de un hombre humilde, sencillo, caritativo, perseverante, con enormes ideales, inmensa fe, de amor puro, que entrego su alma al Señor y que tuvo la visión de ver a la mujer queretana fortalecida para ser un fuerte pilar de la familia y del mundo.
LUIS MARTIN HERNANDEZ
Nació en Salamanca, España el 2 de octubre de 1873 y ese mismo día fue abandonado en el torno de una casa cuna, con una nota que decía “Este niño ha nacido a las 7 de la noche, no ha recibido agua de socorro y se espera se bautice bajo el nombre de Luis Martin Hernández y se conserven las iniciales que van en la ropa. Dios te proteja en este mundo. Hoy 2 de Octubre de 1873. L.M.H”. En sus primeros años de vida estuvo a cargo de diferentes personas y fue uno de los niños expósitos de salamanca y en 1876 fue entregado a sus padres biológicos, el Dr. Juan Luis Martin Santos y Doña Francisca de la Encarnación Hernández Manso. El pequeño Luis Martin, tuvo 4 hermanos, entre ellos, su hermano Antonio Martin Hernández, sacerdote Salesiano, mártir durante la guerra civil de 1936 y hoy Beato. Quedo huérfano de madre la edad de 5 años y tuvo dos hermanas más, con el segundo matrimonio de su padre. Realizo sus estudios primarios con los padres Jesuitas y posteriormente ingreso al Seminario Conciliar de San Carlos Borromeo, en su ciudad natal. En 18994 obtiene una beca para estudiar el bachiller, la licenciatura y el doctorado de La Universidad Pontificia Gregoriana de Roma, graduándose en Filosofía y Letras, así como en Teología. Aconsejado por un Sacerdote Jesuita, se traslada a México, donde ya conocía al Obispo Mons. Leopoldo Ruiz y Flores, quien lo invito a pertenecer en la Diócesis de Galeana, N.L. Arribó a tierra azteca en 1908. Ahí permaneció 5 años, y fue fundador de algunas escuelas para varones y ayudo a la construcción de algunas capillas en distintos pueblos. Después de ser trasladado el Sr. Obispo a la Ciudad de Morelia, el Padre Luis Martin, en su deseo de visitarlo toma el tren y debido a una falla mecánica tiene que permanecer en la Ciudad de Querétaro. Se entrevista con el Sr. Obispo, Mons. Manuel Orozco, quien lo recomienda con la Familia Loyola, quienes le brindan hospedaje y alimento. Le fue asignado el Templo de Santa Clara, para apoyar con ejercicios espirituales así como en otras parroquias. Conoce a la Madre Clemencia Borja Taboada quien lo apoyo intercediendo por el con el Sr. Obispo Orozco, para cumplir el deseo de toda su vida, que es fundar un instituto que brinde educación a las niñas pobres. Logrando su objetivo el 17 de febrero de 1920. Muere dos años después de la fundación de su congregación, a los 49 años de edad, dos años después el 19 de abril de 1922, a causa de una grave pulmonía.
APOSTOLADOS
La Misión de las Misioneras Marianas es el servicio a los pobres, ejerciéndolo en los cuatros apostolados que las rigen. El primero es el servicio a los más necesitados; el segundo es la Educación por lo que cuentan con escuelas, solamente en Querétaro como José Gpe. Velázquez; Clemencia Borja; Carlos Septién; Instituto 5 de Mayo. El Tercero es Servicio a la Salud, por lo que cuentan con el Hospital Luis Martin y el Sanatorio Mariano y el cuarto es el Servicio Asistencial que lo cumplen en los seminarios, Conciliar Mayor, Conciliar Menor, Seminario del Reino de Cristo y en la Casa Episcopal.
Hoy en día pertenecen a la Congregación poco más de 300 Misioneras Marianas distribuidas en 65 comunidades de nuestro país, Perú, Portugal, República Dominicana y África.
MUSEO
La Hermana Elsa Elia Ríos Sáenz, orgullosa comento que dentro de la casa religiosa, cuentan con un pequeño museo donde resguardan objetos personales de la Hermana Clemencia Borja Taboada, así como del fundador, el Padre Luis Martin Hernández. Entre estas pertenencias se encuentran dibujos en lápiz y punturas al óleo, creadas por la madre Borja Taboada; ya que dijo fue una amante del arte, como el teatro y la música, en especial el piano que lo ejecutaba magistralmente. Sobre los artículos del Padre Luis Martin; comentó que se encuentran pertenencias personales como la espada con la que realizo su servicio militar, el baúl con el que transporto sus cosas desde España, su reloj, anteojos y ropa, entre algunas otras cosas. Lamentablemente este Museo tan significativo no se encuentra abierto al público, solamente se puede acceder a él, solicitando un permiso a las religiosas.
Sobre si existe la posibilidad de abrirla al público haciendo un Museo o crear una sala dentro del Museo de Arte Sacro, de esta significativa colección de artículos; con el apoyo de la Diócesis de Querétaro; Monseñor Lara Becerril afirmo que cabe la posibilidad. “Totalmente sí las condiciones se dan y si hay disposición. Sobre todo porque está en una casa religiosa, con un ambiente un poco privado. Pero sí hay las condiciones para hacer un área pública para que los católicos puedan conocer. Totalmente hay disponibilidad. Aquí se trata de sumar y sumar y hacer más accesible la Fe, para todos aquellos que no la reconocen”.
Sin duda, la vida del Padre Luis Martin Hernández, se debe conocer, difundir pero sobre todo imitar.