ENCUENTRO CIUDADANO
El renacido
La radiografía del país no puede ocultar el rotundo fracaso de la política social del régimen, que apesta a corrupción e impunidad. El gobierno peñista a almacenando una cauda de ruina, desilusión y terror ante la pobreza extrema, el hambre y la masacre con dimensiones de genocidio. ¿Dónde estaba José Antonio Meade Kuribreña durante todo este tiempo? Auxiliando al régimen, ocupando la titularidad de cinco secretarías federales en los últimos 2 sexenios. José Antonio Meade es un idolillo fabricado con amnesia, ignorancia y mentiras, ya que su biografía política es como los productos del supermercado de “marca libre”, lo que importa es servir al sistema y servirse de él. Lo de menos es si es con el PAN o el PRI. La supuesta conversión de Meade a la democracia es una fantasía barata. Los hechos acreditan que es un salinista transexenal. Aceptar la candidatura del PRI es un acto de adhesión, no de repudio y Meade empezó a militar en el gobierno al encabezar con el compacto grupo Itamita (ITAM), un gobierno proveniente del fraude electoral (FECAL) y dandole continuidad con Peña Nieto, promoviendo latrocinios y arbitrariedades desde el poder, en su expresión más siniestra. Más aún, con la arrogancia de los déspotas, Meade da por hecho que será Presidente de México. ¿Cómo piensa ganar? Pues como está acostumbrado el PRI: a la mala. Porque su comportamiento como político salinista es la antítesis del demócrata. Y en caso de que triunfe el precandidato del PRI, continuaría el pacto de impunidad. La maquinaria priista y de otros géneros lo abriga pero no de manera incondicional. El arropamiento lleva una condición muy clara: defender los intereses de los priistas empezando por el presidente. Meade es el modelo de la reedición del priismo corrupto, en la que él es su nuevo limpiador.
La historia reciente nos ha mostrado que es enormemente difícil romper las complicidades en el gobierno de los cuates y de unos cuantos, que comulgan con grandes intereses fácticos, nacionales y extranjeros. Pero hay consecuencias sobre los muchos asuntos privatizados, de volverlos su negocio, porque el seguir en esa lógica, cada vez más economistas han ido documentando el enorme costo que tiene para el país la violencia y la inseguridad. La designación de Meade como candidato a la Presidencia es la garantía de más de lo mismo. No están mirando o buscando que se modifique la ruta seguida, sino que más bien designaron a una persona que pueda garantizar la continuidad. Que continúen los jugosos negocios para unos cuantos y el hambre para el resto. La designación de Meade evidencia el renacimiento del dedazo del priiato. Éste y sus satélites venden para su salvación y persistencia a un Meade renacido, impoluto y casto de la suciedad creada por ellos. Pero se equivocan su nonato, nació viejo y mañoso. Y como señala Jesús Cantú, “reaparece, como sucedió durante el gobierno de Carlos Salinas de Gortari, un proyecto transexenal para preservar las ambiciones políticas de un pequeño grupo de priistas que se aferra al poder”. Y Mientras José Antonio Meade habla de negocios, dinero y poder, María de Jesús Patricio Martínez, Marichuy, ha dicho palabras por la tierra, el trabajo y la vida, contra el despojo, el dinero y la muerte. Es deber el escucharlas y considerarlas.
Apostilla: La terrible propuesta de AMLO sobre la amnistía a capos del narcotráfico, ya tenía patente y se viene practicando desde hace muchos años por gobiernos priistas y panistas. La salvaguarda de negocios como el lavado de dinero, las transferencias financieras, el secreto bancario, los paraísos fiscales, etc. forman parte de una amnistía en la práctica a través de la corrupción y la impunidad asociada. Y como prueba de ello están la integración de agentes gubernamentales de todo tipo al negocio del trasiego y violencia criminal, encontrando colaboración, apoyo y licencia por parte de policías y militares de todo rango, llegando hasta la de Gobernadores. Un indulto silente.
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