Como si fuera ayer, medio siglo después, los miembros de la generación reconocida como la más brillante de abogados de la Universidad Autónoma de Querétaro -la 67, a la que pertenecen el ex gobernador Enrique Burgos García y el ex dirigente nacional del PRI, Fernando Ortiz Arana- volvieron a las aulas, acompañados de algunos de sus maestros, como los ex directores Jorge García Ramírez y José Ortiz Arana, con los que recordaron que la elevada misión de la Universidad se realiza a través de la cultura, la formación de profesionistas y la investigación científica.
Al reencuentro acudieron todos junto con los profesores ya mencionados, además de Leopoldo Espinosa y Gustavo Velázquez, a los que entregaron sendos reconocimientos en el marco de una emotiva ceremonia en la que se destacó que con sólo 14 miembros, este grupo ha ocupado casi 40 cargos nacionales, estatales y municipales de primer orden.
Así lo consignó el decano de los maestros de la UAQ, Jorge García Ramírez, docente desde 1952, al reconocer como el mejor a este grupo estudiantil por los cargos públicos, en la dirección de empresas y el ejercicio pfoesional.
Por su parte José Ortiz Arana señaló que elemento de prueba de la trascendencia de la Universidad es esta generación a la que dio clases de derecho constitucional, sustituyendo al célebre licenciado José Guadalupe Ramírez Álvarez, que fue recordado junto con Fernando Díaz Ramírez, Antonio Pérez Alcocer, Alfonso Ballesteros Ríos, José Arana Morán, José María Esquivel y Rodríguez Aguillón, entre otros.
A ellos se refirieron repetidamente en sus intervenciones los alumnos Jesús Castellanos Malo, ex magistrado del Tribunal Superior de Justicia: Salvador Rojas Paredes, ex secretario del Trabajo y José Luis Gallegos Pérez, actual presidente del Consejo de Notarios.
En homenaje a sus maestros, las abogadas Magdalena Ramírez González y Margarita Ugalde Tenorio les entregaron reconocimientos a los profesores presentes, uno de los cuales, Jorge García Ramírez, volvió a pasarles lista, como hace 50 años. Previamente hubo una misa de acción de gracias en la Congregación, con la asistencia de los profesionistas y sus familiares.
La anécdota, sin embargo, se dio en el Aula Magna de la UAQ, en donde García Ramírez destacó la trascendencia de esta generación tan destacada y en donde, por cierto, se reencontraron los hermanos José y Fernando Ortiz Arana. A este grupo pertenecen también Manuel Cevallos Urueta, Salavor Muñiz, Ramón Robles Ordoñez, Aarón Montes y Cipriano Pineda, entre otros.
Todos agradecieron a la Universidad Autónoma de Querétaro, directivos y maestros, el haberles otorgado el beneficio de la educación superior y acordaron que José Luis Gallegos Pérez y Salvador Rojas Paredes preparen, de una vez, las celebraciones del centenario de la Generación.
POR: SERGIO ARTURO VENEGAS ALARCÓN