El Liverpool volvió a sonreír después de varias semanas llenas de tropiezos y dudas. El equipo de Arne Slot consiguió un triunfo vital por 2-0 en su visita al West Ham, un resultado que llega en medio de una crisis profunda y que sirve para aliviar momentáneamente la presión que rodea al club.
La gran noticia de la tarde fue el primer gol de Alexander Isak en la Premier League como futbolista de los Reds, un momento que había tardado tras su fichaje millonario en verano.
Los 21 puntos que suma el Liverpool lo colocan en el octavo lugar de la clasificación, a solo dos unidades de los puestos de Champions y con la esperanza de reengancharse a la pelea por lo más alto. La distancia con el líder, el Arsenal, todavía es de ocho unidades, pero el triunfo en Londres apunta a un posible punto de inflexión para los de Anfield.








