En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres (25N), la psicóloga Claudia Hernández, de Psyque, advirtió que el municipio de Amealco de Bonfil continúa entre las zonas más críticas del estado en materia de feminicidios y violencia de género. “Los municipios de Amealco de Bonfil muestran datos muy preocupantes en cuestión de feminicidios, evidenciando la situación crítica que se enfrentan numerosas mujeres de la zona”, señaló.
Durante una rueda de prensa, detalló que, conforme a los datos más recientes, “el 75 por ciento de las mujeres de más de 15 años en Querétaro han sufrido algún tipo de violencia”. Además, destacó que “el estado se sitúa en el tercer lugar (…) a nivel nacional en términos de violencia contra las mujeres”.
Respecto a los tipos de violencia más frecuentes, Hernández expuso que, entre las mujeres que han sido víctimas, “el 58 por ciento ha experimentado violencia psicológica, seguida por violencia sexual, con el 56 por ciento; violencia física, con el 39 por ciento; y violencia económica y patrimonial, con el 32 por ciento”. También señaló que, en la mayoría de los casos, los agresores pertenecen al entorno cercano, pues “más del 70 por ciento de los agresores sexuales de mujeres, niños y adolescentes son individuos reconocidos y más del 50 por ciento pertenecen a la familia”.
En cuanto a la evolución de estas cifras en los últimos años, la especialista afirmó que se ha sostenido y precisó que municipios como Jalpan de Serra también presentan niveles elevados de agresiones contra mujeres.
La presidenta y fundadora de Psyque, Elydia Barbosa Benítez, explicó que la dinámica de violencia varía entre la capital y los municipios. “Existe más violencia física en los municipios que aquí en la capital”, indicó. Añadió que en zonas rurales persisten patrones culturales arraigados: “En los municipios todavía son como de machetes y esas cosas (…) tienen más esta cultura de que la mujer es la que tiene que esperarse, aguantarse y hacer lo que el hombre dice”.
En cuanto a la relación entre violencia y conducta suicida, Barbosa Benítez señaló que “las mujeres intentan más veces el suicidarse que los hombres”, aunque aclaró que “el hombre lo consume más que la mujer”. Explicó que, en el caso femenino, “una mujer logra, bueno, tarda entre un año a nueve años en poder pedir ayuda” y que alrededor del 15 por ciento llega a un intento suicida.
Por su parte, el psicoterapeuta Isaac Ibarra Vázquez analizó la diferencia en los procesos emocionales entre hombres y mujeres que viven violencia. Indicó que “el hombre para atravesar la transición del duelo es cuando ya se separa de la persona que fue violentadora”, mientras que “la mujer atraviesa el duelo con su violentador ahí”, lo que genera trayectorias distintas en la recuperación. “La mujer desarrolla una gran capacidad de resiliencia teniendo al violentador ahí al lado”, apuntó.
Finalmente, Barbosa Benítez destacó que la violencia suele presentarse desde etapas tempranas en las relaciones afectivas, sobre todo en el noviazgo antes que en el matrimonio
