ALHAJERO
No estamos fritos
El ambiente era muy bueno en la comida que sostenían –el viernes pasado- los ex Presidentes del PRI con los dirigentes actuales del partido, Enrique Ochoa Reza y Claudia Ruiz Massieu.
Las anécdotas salpicaban la mesa en la que departían Jorge de la Vega Domínguez, Dulce María Sauri, Pedro Joaquín Coldwell, Adolfo Lugo Verduzco, César Camacho, María de los Ángeles Moreno, Humberto Roque Villanueva y Cristina Díaz.
El ágape tenían lugar en el mismo salón del partido en el que hace 17 años, julio del 2000 –días después de que el PAN le ganara por vez primera al PRI la Presidencia de la República- los ex dirigentes priistas de entonces le exigieran a su Presidenta, Dulce María Sauri, hacer pedacitos su renuncia y mantenerse al frente del partido (para evitar que Ernesto Zedillo tomara el control).
El tema que los convocó fue la Asamblea Nacional a celebrarse el 12 de agosto. Espacio donde pueden cambiarse los estatutos del partido y en el que habrá de definirse el proceso para elegir –en los próximos meses- al candidato del tricolor para la Presidencia de la República en el 2018.
Así que comenzaron evocando desde la preparación y desarrollo de las Asambleas que les tocó vivir, hasta la postulación del elegido.
Se habló de cuando Javier García Paniagua renunció a la Presidencia del PRI tres días después de haber sido designado; de la famosa “pasarela”; de cuando se establecieron los “candados” para evitar que los tecnócratas se apoderaran del partido; y de muchos otros momentos.
Pero había un añadido importante al anecdotario: La perspectiva de los años y el análisis de cuáles fueron los efectos positivos y negativos de las decisiones que se tomaron en cada momento.
Y de ahí, al hoy. A lo que se viene para el 18.
A decir de Sauri, había preocupación en la voz de los ex Presidentes por lo que pueda pasar con el PRI en el 2018: “Pero era una preocupación asertiva, no la de estar fritos o a punto de saltar a la sartén”.
Más bien, el consenso en la mesa –incluidos los actuales dirigentes-, apuntaba a que “iremos a una elección con un alto grado de dificultad”.
Respecto de los 10 años de militancia que se requieren para ser candidato presidencial, “no se habló”, indica Sauri, pero destaca el hecho de que “nadie habló a favor de preservar los candados”.
Además, desde su perspectiva, es irrelevante mantener el de los diez años porque ni siquiera se precisa si éstos deben ser continuos (y se pueden inventar credenciales antiguas), cuando el candado importante –haber tenido un cargo de elección popular- ya se quitó.
A Ochoa le preguntaron directamente –es lo que ansiaban saber- para cuándo saldría el Candidato. Les contestó que había que “esperar los tiempos que marca la ley”.
“Ojalá el procedimiento, el cómo se va a construir la candidatura de cara a la sociedad sea el adecuado, porque eso sí es fundamental”, apuntó la yucateca.
-0-
GEMAS: Se vende el dólar a menos de 18 pesos.