La cifra de muertos por inundaciones repentinas en el centro de Texas aumentó a 32, incluidos 14 menores de edad, según autoridades que pidieron una declaratoria de “desastre federal” para atender la emergencia.
“Lo que puedo decirles, según la última información, es que hay 32 fallecidos, 18 de ellos adultos y 14 niños. Cinco de los adultos siguen sin identificar y tres niños siguen sin identificar”, aseguró en conferencia el sheriff del condado de Kerr, Larry Leitha.
En una conferencia, el Gobernador del estado, Greg Abbott, firmó un documento para solicitar oficialmente la “declaración de desastre federal” y que la Administración de Donald Trump otorgue asistencia.
Kristi Noem, Secretaria de Seguridad Nacional, presente en la rueda de prensa, dijo que habló con el Mandatario para que acceda a la petición. “El alivio llegará”, afirmó.
El Gobernador republicano amplio la declaratoria estatal emergente para incluir los condados de Bexar, Burnet, Caldwell, Guadalupe, Travis y Williamson.
“Seguiremos añadiendo condados según sea necesario, a medida que las condiciones empeoren o mejoren en todo el estado de Texas”, declaró.
“Nos aseguraremos de que todos los recursos del estado estén disponibles para cada condado sujeto a esta declaración de desastre”.







