El modernismo mexicano regresa con fuerza: el Museo Internacional del Barroco prepara magna exposición del Arq. Juan José Díaz Infante, que mostrará una pequeña parte del Archivo Díaz Infante. Un magno archivo de Arquitectura y Arte de México que empieza en los 50s hasta nuestros días que incluye arquitectura, historia del dibujo, fotografía, video, perfomance, instalación, arte electrónico y todo tipo de documentos históricos
En una esperada celebración del legado visionario del arquitecto Juan José Díaz Infante Núñez, el Museo Internacional del Barroco alista una exposición sin precedentes que reunirá más de 100 piezas de archivo antológicas de una de las figuras más audaces e influyentes de la arquitectura mexicana del siglo XX y XXI. Aún en fase de negociación, se prevé su inauguración en septiembre de este año y se perfila ya como uno de los eventos culturales más relevantes de 2025.
La muestra incluirá obras emblemáticas como el edificio de la Bolsa Mexicana de Valores, considerada por expertos como el primer edificio que inaugura formalmente el Modernismo en México, y la monumental Terminal de Autobuses de Pasajeros de Oriente (TAPO), cuyo domo circular —del tamaño del domo de la Basílica de San Pedro en Roma— la consagró como la estación de camiones más grande del mundo en su tipo. Ambos proyectos no sólo definieron un estilo, sino que también simbolizan una etapa de profundo optimismo y transformación potencial de México.
Pero la exposición no se limitará a repasar los hitos construidos del arquitecto. Incluirá una sección dedicada a Kalikosmia, su revolucionaria teoría arquitectónica que plantea una lectura espacial entre la utopía, el lenguaje cósmico, los temas de sismos y la responsabilidad social. Un discurso que no se escucha de manera usual en los círculos académicos o profesionales de los bienes raíces.

La muestra abordará también su trabajo en arquitectura espacial, sus incursiones en el diseño de hábitats extraplanetarios y, sobre todo, sus soluciones de arquitectura social pensadas para un México del futuro: viviendas populares prefabricadas, usando el plástico por sus propiedades indestructibles, cambiando el paradigma del plástico como un producto desechable, inclusive proyectos urbanos integrales adelantados a su tiempo, prever una arquitectura ligera para una ciudad construida arriba de un lago, saber calcular edificios para los eventos sísmicos, la honestidad como una atribución fundamental para que no se caigan los edificios, la piel del espacio es un problema de pensamiento que trasciende el estilo y él lo denomina diseño de espacios y sistemas en vez de arquitectura.
El precedente inmediato de esta iniciativa —la exposición en Bellas Artes y el Museo Nacional de Arquitectura hace algunos años— atrajo a más de 30,000 visitantes, y las expectativas para esta nueva entrega son aún mayores. La curaduría se centrará no sólo en mostrar planos, maquetas y fotografías, sino también en generar una experiencia inmersiva que permita al visitante entender el pensamiento transdisciplinario de Díaz Infante, que unía arte, ciencia, tecnología, arquitectura y compromiso social.
Para los organizadores, esta exposición representa una oportunidad histórica para volver a colocar a Díaz Infante en el centro del debate cultural y arquitectónico del país, y para que nuevas generaciones redescubran una obra que se adelantó décadas a su tiempo. Puebla, con su creciente perfil cultural y el carácter vanguardista del Museo Internacional del Barroco, parece ser el escenario ideal para esta retrospectiva. Arquitectura enmarcada por arquitectura.
Se espera que en las próximas semanas se confirme la fecha oficial de apertura. Mientras tanto, el mundo de la arquitectura, las artes y la cultura ya aguarda con expectación el regreso de una mente que nunca dejó de mirar hacia el futuro.

Semblanza del Arq. Juan José Díaz Infante Núñez
Es parte de la generación 54 de la UNAM donde se gradúa de Arquitecto. Es fundador del equipo de fútbol Pumas. Ingresa a trabajar como Diseñador Industrial en 1961 a DM Nacional y es responsable del diseño de la Linea H de escritorios. En 1966 diseña su primera casa de plástico Aztecalita como una solución a la vivienda social, Pemex, una empresa de petroquímicos debe de ser la responsable de la vivienda digna de la que habla la constitución. Sobre todo diseñando un molde que incluye los muebles. En 1969 diseña la Casa Popular Durango bajo el mismo concepto usando la fibra de vidrio. Se construyen más de 4000 casas de este tipo, algunas todavía sobreviven en distintas partes del país. En 1979 construye la TAPO, en ese momento el domo de concreto presforzado y acrílico más grande del mundo. En 1980 hace el edificio de Citibank, la primera fachada de vidrio espejo y un edificio de 4 fachadas, generando gran polémica de la escuela mexicana de arquitectura. En 1990 termina el edificio de la Bolsa Mexicana de Valores. En 1995 diseña una nueva casa de plástico de rotomoldeo que gana el premio mundial de rotomoldeo. En 1985 diseña su casa de Amsterdam 270, un proyecto exitoso de la asísmica. En sus 50 años de arquitecto proyectó más de 200 edificios y construyó más de 100. Trabajando para firmas como American Express, Procter and Gamble, Probursa, Secretaría de Economía y Contraloría. Hacia el final de su vida empieza a proyectar arquitectura esférica, se puede ver la escultura en la UNAM donada por la generación 54, también en la UNAM se puede ver el edifico de la Cantera de los Pumas. Se le han hechos muchos reconocimientos entre los que destacan homenajes del Colegio de Arquitectos, y el reconocimiento del premio Tolsá.









