La inversión fija bruta de México se elevó 3.4 por ciento anual en 2024 ante la inminente relocalización de cadenas de valor o ‘nearshoring’, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Con base en cifras originales, el Inegi indicó que se obtuvo este resultado el año pasado por los avances anuales del 1.8 por ciento en la construcción y del 5.3 por ciento en la maquinaria y equipo.
La inversión privada se elevó 4.5 por ciento mientras que la del sector público decreció 4.8 por ciento.
Tan solo en diciembre, la inversión fija bruta cayó 4.1 por ciento interanual debido a la caída en la construcción (9.5 por ciento) y pese al aumento de la maquinaria y equipo (1.9 por ciento).
En el último mes de 2024, la inversión privada retrocedió 2.4 por ciento interanual, mientras que la privada cayó 14.9 por ciento.
Además, según datos ajustados por estacionalidad, la inversión fija bruta cayó 2.6 por ciento en diciembre frente al mes precedente.
Esto fue una combinación de las bajas mensuales del 1.8 por ciento en la construcción y de la contracción del 3.8 por ciento en maquinaria y equipo.
Las cifras reflejan el comportamiento económico de México, que creció 1.5 por ciento anual en 2024, aunque en el cuarto trimestre cayó 0.6 por ciento trimestral, su primera contracción así en tres años, según la estimación que reveló el Inegi la semana pasada.
La inversión fija bruta de México se disparó 19.7 por ciento en 2023 ante el auge del fenómeno de relocalización de cadenas o ‘nearshoring’.
Antes, subió 6 por ciento anual en 2022 y en 2021 repuntó 10 por ciento tras la peor etapa de la pandemia del coronavirus, que provocó una contracción del 18.2 por ciento en la inversión en 2020.
La inversión fija bruta permite conocer el comportamiento de la inversión en el corto plazo, según el Inegi, y está integrada por los bienes utilizados en el proceso productivo durante más de un año.