A cuatro metros de profundidad en las calles del Centro Histórico hay toda una ciudad. En República de Guatemala 16, el Gobierno del tlatoani Ahuítzotl florece debajo de una urbe moderna que se aferra a su pasado gracias a que, luego de siete años de trabajo realizado por etapas, dejó al descubierto el templo de Ehécatl y el juego de pelota, el cual estará abierto al público gratuitamente, una vez que se terminen las labores arqueológicas correspondientes.
No hay una fecha definida para que sea abierto al público, pero se prevé que ello ocurra después de 2018, en el espacio que pertenece a los dueños de Hotel Catedral.
En días recientes, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) dio a conocer el hallazgo localizado a espaldas de la Catedral Metropolitana, donde también se encontraron unas escalinatas de cuatro peldaños, por donde debieron ingresar los combatientes del juego de pelota.
El arqueólogo Raúl Barrera explicó, en una entrevista con 24 HORAS, que en esta temporada de investigación, que comenzó en septiembre de 2016, se excavaron aproximadamente cuatro metros de profundidad. En los restos hay signos de la Etapa V de construcción (del año 1481 a 1486); de la VI (de 1486 a 1502) y muy poco de la VII (1502 a 1521).
“No sabemos las dimensiones reales, porque no tenemos posibilidad de ampliarnos por las colindancias, principalmente por los edificios aledaños que también son históricos, pero debe tener aproximadamente entre 34 y 36 metros de longitud de Norte a Sur; su ancho de Oriente a Poniente aún lo desconocemos, sería aventurado dar alguna estimación”, dijo.
El especialista explicó que a pesar de la colindancia con edificios modernos, éstos no ponen en riesgo la conservación de los vestigios; no obstante, reconoció que la Ciudad de México es complicada, pues al construirse en zona lacustre, presenta hundimientos.
“Ante estas problemáticas tratamos de buscar soluciones. Esto se va a preservar, lo tenemos absolutamente claro. Por lo que estamos encontrando nos debemos coordinar con los propietarios y los arquitectos, para encontrar soluciones y creo que sí es posible, para que al hallar estos vestigios se puedan exhibir”, dijo.
Intervención por etapas
El especialista recordó que la primera intervención en Guatemala 16 fue de diciembre de 2009 a abril de 2010, momento en que se determinó que se trataba del templo de Ehecátl Quetzalcóatl.
En esa temporada de investigación no hubo las condiciones para ampliar las excavaciones, principalmente por el espacio, pues los vestigios estaban próximos a construcciones modernas que se debían de liberar para continuar con los trabajos.
En 2014 se hizo una segunda temporada de trabajos, sobre todo la parte sur del predio, en donde se encontró parte del juego de pelota y se excavó una ofrenda de conjunto de cervicales, es decir de cuellos humanos que seguramente fueron decapitados y ofrendados al juego de pelota.
“Esto es el Templo de Ehécatl Quetzalcóatl, la parte posterior, se trata de un edificio mixto que es de forma rectangular que está orientado su eje de Norte a Sur y su fachada del templo debe de ser hacia el Oriente, debajo de los edificios vecinos, posiblemente debajo del Centro Cultural España, en este predio se ve la mayor parte del templo re Ehécatl; pero no su fachada”, detalló.
AGENCIAS