Entre los muchos fracasos del gobierno anterior, notorio sobre todo en esta temporada de vacaciones y aumento del tránsito aéreo, perdura la aberración de sustituir un aeropuerto de dimensiones suficientes para muchos años de modernidad, por un sistema regional con tres puntos de desarrollo.
La Cuarta Transformación ofreció una fantasía (por innecesaria y caprichos) denominado Sistema Aeroportuario del Valle de México cuyas esquinas serían Toluca, Tecamac (AIFA) y Benito Juárez (CDMX). No ocurrió así.
Los enlaces terrestres (carreteros y ferroviarios) con el aeropuerto de Santa Lucía no son todavía los adecuados, no digamos óptimos. Le han servido mucho a la ciudad de Pachuca y poco a la capital del país cuya terminal aérea se desvencija y desguaza porque no tiene ni siquiera los recursos del impuesto por el uso de la terminal. Es un zombie vergonzoso y mugriento, apenas digno de Managua, Puerto Príncipe o La Habana.
Pero mientras eso ocurre los ingenieros militares – especialmente el general, Gustavo Vallejo (constructor)–, se sienten orgullosos. Ellos no tomaron la decisión de ampliar el aeródromo de la Defensa. Recibieron una orden y en su condición de subordinados cumplieron con ella.
Por eso ahora circulan estos datos:
“El Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, cerrará el año con buenas cartas, pues hace unos días el general Isidoro Pastor (Director General), reiteró que el AIFA es un aeropuerto autosostenible, financieramente hablando, pues ya no requiere recursos fiscales para operar, porque sus gastos de operación se cubren con sus ingresos.
“Para este año, explicó el general, se estiman por arriba de 2 mil 600 millones de pesos, mientras que los gastos de operación estiman cerrarlos en 2 mil 200 millones de pesos.
“Con esto, en dos años rebasaron su punto de equilibrio y así se han mantenido en todos los trimestres, de tal manera que, en este último trimestre de 2024, continuarán por arriba de ese punto de equilibrio.
“Otro dato interesante es que su volumen de carga se incrementó en más de 230 por ciento, respecto al mismo periodo de 2023, por lo que de enero a octubre de este año registró 375,616.6 toneladas nacionales e internacionales.
“Y para cerrar, recordemos que recientemente recibió en París, Francia, el galardón Prix Versalles, en la categoría Selección Mundial, por su diseño arquitectónico y funcional, lo que lo convierte en uno de los seis aeropuertos más distinguidos a nivel global.
El Prix Versalles es un premio internacional de arquitectura y diseño que destaca las obras más sobresalientes en diversas categorías como museos, hoteles restaurantes, tiendas, aeropuertos, campus universitarios, deportivos; también se galardonaron los aeropuertos de Changi, de Singapur, el Suvarnabhumi de Tailandia, el Aeropuerto Internacional Logan de Boston, y el Aeropuerto Internacional de Kansas City.
“El Prix Versailles es un premio internacional de arquitectura y diseño (ojo, no de urbanismo o aeronáutica), que reconoce obras sobresalientes en varias categorías, como museos, hoteles, aeropuertos, estaciones de pasajeros, entre otros.
“De acuerdo con el secretario general del comité, Jérôme Gouadain, el AIFA, “es un aeropuerto de talla mundial, y es una obra muy rara. El aeropuerto fue observado por el comité de selección que es muy exigente y que incluso descarta la mayoría de las obras presentadas”.
Sin embargo la cancelación del aeropuerto en Texcoco generó la ruina irrecuperable de las terminales 1 y 2 por una especie de canibalismo: el dinero generado por su operación fue usado para pagar deudas del edificio abortado. Y con otras partidas del presupuesto nacional se hizo una terminal de menores dimensiones, ahora alabada por su diseño y arquitectura.
Pero los costos fueron bestiales y el atraso, también.
Sin embargo para los militares quedan estas palabras de Manuel Gómez Pedraza (1827):
“… las utilidades que las naciones cultas han sacado del cuerpo de ingenieros, no se han reducido a sólo la guerra y a la defensa; también han sido extensivas a la hermosura y comodidad de edificios canales y caminos…”
