Será el próximo 30 de noviembre cuando se realice en Querétaro la llamada “Última Parada” de la gira de despedida que realiza Lupita D’Alessio.
Y que mejor que para complacer a sus fans y para darle forma a un espectáculo completamente redondo, que la llamada Leona Dormida esté acompañada de su hijo Ernesto D’Alessio.
El Auditorio Josefa Ortiz de Domínguez abrirá sus puertas para recibir a los seguidores de Lupita y de Ernesto para disfrutar de los éxitos de la cantante quien ha vendido más de 25 millones de discos en su carrera.
“Esta es una gran oportunidad para los fans de mi madre de disfrutar de sus éxitos. Yo he buscado integrarme y complacer al público para darle forma a este show con el cual regresamos a Querétaro, después de más de un año.
“No es el mismo show, lo hemos ajustado para hacerlo mucho más redondo y puedo asegurar que el público que asista saldrá totalmente complacido”, comentó Ernesto D’Alessio durante su visita a Querétaro para platicar de esta próxima presentación.
“Gracias Tour” es el nombre de esta serie de presentaciones que tienen Lupita D’Alessio junto con Ernesto D’Alessio y que ha llegado a plazas en nuestro país así como en algunas ciudades de Estados Unidos.
“Nos da mucho gusto estar en Querétaro, es un público que siempre nos ha recibido muy bien y que quiere mucho a la familia D’Alessio. Ya ven que también mi hermano Jorge ha estado aquí con Matute”, reflexionó Ernesto.
“Mi hermano es un productor y músico muy cabr… Es muy bueno en lo que hace y me alegra mucho que le esté llendo muy bien con Matute”, comentó.
En cuanto al concierto “Gracias Tour”, Ernesto aseguró que su madre tomó la decisión de retirarse con la intención de poder descansar y para poder decir adiós de una forma digna, nunca por cuestiones de salud como se llegó a mencionar.
“Ella quiere retirarse en buenas condiciones, que el público la vea bien sobre el escenario. Ahora disfruta este nuevo show más consolidado, amarrado y ajustado en el que cantamos puros éxitos, por lo que es un concierto más largo, dirigido por Beto Domínguez, quien ha sido el director musical de mi mamá por 25 años”.
El artista, quien fuera integrante del grupo DKDA, afirma que los viajes cansan y que mamá a sus 70 años lo reciente, aunque sigue teniendo intacta la inquietud y el gusto de estar en un escenario.
“Entiendo por eso que diga que se quiere retirar, aunque también entiendo que es mucha nostalgia estar alejada de los escenarios.
“El mejor consejo que me ha dado mi madre es cuando me dice que ‘menos es más’. Me ha dicho que hay que transmitir con el público con la voz, con la música y no con tantas cosas alrededor. Se puede llegar a exagerar con la emoción del mismo show.
“Me ha enseñado ha estar bien plantado sobre el escenario para enfrentar al público y transmitirle emociones. Parece sencillo pero es difícil hacerlo. Es un gran consejo”, revela.
Sabe de la responsabilidad de llevar el apellido D’Alessio y de las comparaciones que invariablemente va a haber.
“Disfruto la presión que implica pararme en un escenario, los nervios que siempre están presentes. Significa sentir una emoción por el trabajo.
“No sé me olvida que cada que estoy frente al público debo esforzarme para hacer las cosas mejor. Mi mamá, mi papá ( Jorge Vargas), mi tío abuelo (Ernesto Alonso) han puesto el nível muy alto, han dejado un legado importante que debemos respetar, tanto mis hermanos (Jorge, César) y yo. Hay que mantener ese estándar y con lo que viví de niño aprendí a nunca subirme a un escenario con una gota de alcohol. Nunca lo he hecho”, comentó.
Para finalizar, Ernesto D’Alessio destacó el valor que tiene en su carrera el teatro. “Me inicié y me formé en el teatro musical clásico. Estoy orgulloso de haber hecho obras como “Los miserables”, “ José el soñador”, “El hombre de la mancha”, entre otras. Espero pronto poder seguir haciendo teatro, que es parte de mi vida”, concluyó.