FUERTE EMBOTELLAMIENTO provocó en la carretera 57 el paso de imponentes tubos de más de 462 toneladas que viajan desde Altamira, Tamaulipas a Tula, Hidalgo a una velocidad máxima de 10 kilómetros por hora. El gobierno estatal ordenó la detención a la altura de Jofrito, delegación de Santa Rosa Jáuregui, exigiendo garantías por el posible daño a los pavimentos. Mínimo.