Tras advertir que el Embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, no tiene nada que opinar sobre la reforma judicial, el Presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que prefiere que se sancione a México a través del T-MEC, que ceder en materia de soberanía.
El Mandatario federal aseguró que el acuerdo con el vecino país y Canadá tiene finalidades de carácter comercial, pero ese compromiso no convierte a México en apéndice o colonia de esos países.
Aseguró que no habrá penalizaciones, pero el debate sobre el tema es interesante porque pone en el centro la independencia nacional lograda a través de la historia con muchos sacrificios.
“Es interesante también eso, debatirlo y que la gente sepa, aun en el caso, que no es real, de que hubiesen sanciones a México (vía T-MEC), nosotros los mexicanos tenemos que poner por delante nuestra soberanía.
“No podemos someternos, es la historia de México, es el sacrificio de mucha gente por lograr una Patria libre, independiente, soberana, eso está por encima de cualquier tratado”, sostuvo.
Durante su conferencia mañanera López Obrador volvió a responder a las declaraciones del representante diplomático estadounidense en contra de la reforma al Poder Judicial que hoy se discute en el Congreso mexicano.
Y es que, de acuerdo con el Embajador, los cambios que se pretenden realizar a la Constitución no sólo permitirían la infiltración del narcotráfico y pondrían en riesgo la democracia, sino también las relaciones bilaterales en materia comercial.
Esta mañana, el Presidente mexicano insistió que ningún extranjero debe intervenir en asuntos nacionales, aun cuando se busque una justificación por las supuestas implicaciones con el T-MEC.
El viernes pasado, Ken Salazar se dijo dispuesto a dialogar con el Gobierno mexicano para intercambiar opiniones sobre la elección de jueces a través de las urnas, planteada en la reforma de AMLO.
Ese día, la Cancillería envió una nota diplomática a la Administración de Joe Biden con un “profundo extrañamiento”, por la “desafortunada e imprudente” declaración del Embajador en contra de la modificación constitucional, que igual prevé renovar a la Corte en 2025.
Hoy, López Obrador cerró cualquier posibilidad de discusión del tema con representantes de Estados Unidos o Canadá, Gobierno a quien había dicho, se enviaría una notificación formal porque el Embajador Graeme Clark, afirmó que la reforma judicial genera incertidumbre a los inversionistas de su país.
“Es que diálogo siempre debe de haber, el asunto es que los temas relacionados con México, pues nos corresponden a nosotros, no pueden venir extranjeros, ningún Gobierno extranjero, a tratar asuntos que solo corresponden a los mexicanos, es un principio básico de independencia, de soberanía.
“Es como si yo pido ir a Washington a dialogar sobre la venta de armamentos para hacer la guerra en el mundo, ¿qué me tengo yo que meter?”, comparó.
-¿Este tema entonces no lo tocaría con él (Ken Salazar)?, se le preguntó.
“Nooo, ese es un asunto de los mexicanos y se está resolviendo en las instituciones de nuestro País y ahí le andan buscando la forma, dándole la vuelta, se andan por las ramas diciendo, no es como hay un tratado comercial, nos podemos meter, noo, si el tratado no es para que nosotros cedamos nuestra soberanía, el tratado es comercial, es para tener una muy buena relación económica-comercial que nos conviene a las dos naciones.
“Pero no es para que México se convierta en un apéndice, en una colonia, en un Estado asociado, aun cuando haya algunos mexicanos, además, siempre ha habido en la historia, que quisieran eso, que quisieran que nos volviéramos colonia de un país extranjero, Estado asociado”, abundó.