Teniendo una dirigencia desconectada de la realidad y las bases partidistas ignoradas, el PRI se encuentra en riesgo de morir de inanición. Así lo sentenció el ex gobernador Enrique Burgos durante su participación en la mesa de Causa Política, transmitido en Exxa 95.5. Y es que Enrique Burgos García apuntó que si bien se legalizó la permanencia de Alejandro Moreno en la Presidencia del Revolucionario Institucional por los próximos 8 años, se debe hacer una distinción entre lo legal y lo legítimo. Al retomar su frase de “Elecciones son lecciones”, Enrique Burgos García advirtió una dura lección que deja a un PRI fracturado y con la peor de las dirigencias que ha logrado amarrarse a la silla por los próximos 8 años “El riesgo es, y lo digo con el mayor cuidado, un adelgazamiento tal del partido, a la hora que muchos priistas no encuentren espacio, quizá el partido muera de inanición, porque los cuadros de tradición, de fondo, no están aportando”, sentenció.
Para el ex gobernador de Querétaro, lo peor no ha pasado. Desde su perspectiva, si en estas elecciones al PRI le fue mal, en los próximos tres años puede costarle la desaparición “No tendrá ni registro”, pues la velocidad de la caída en el tricolor se asemeja a la de un avión en picada. Burgos García, no duda de los cuadros y perfiles de su partido que podrían ayudar a detener lo que parece inminente, sino la capacidad de Alejandro Moreno de escuchar y conciliar “Va a llegar el momento en que la propia Presidencia verá como se le ponen las cosas. Está a punto de iniciar un nuevo periodo de sesiones en las Cámaras. ¿Qué tipo de batería tendrá el PRI? ¿Con los que van?, el propio dirigente estará ahí. Tenemos que ver que actitud asumirán”.
Con el fino análisis que le caracteriza, Burgos García acotó que la reelección de “Alito”, le resta calidad moral al PRI para en un futuro, cuestionar a aquellos que busquen la perpetuidad en el poder “El principio de no reelección es Constitucional para las estructuras de gobierno. Pero también se asimiló para el partido. La no reelección como un principio fundamental que permitiera la frescura, renovación. El dar espacio a nuevos criterios y actitudes. Yo creo que la reelección en el partido es un mal antecedente. ¿Qué le dirías a cualquier personaje gubernamental que ocupe una posición de cabeza cuando pretenda una reelección?, creo que tiene más consecuencias de las que aparentan”.
Señalando que la reelección de Alejandro Moreno es un hecho consumado, más allá de las impugnaciones y procedimientos, dijo “Palo dado ni Dios lo quita”.
Cuestionado sobre el momento en que se pervirtió la dirigencia nacional del PRI, Enrique Burgos advirtió que se ignoró la realidad, sin tomar el pulso a las bases “Los buenos dirigentes del PRI, al igual que un gobernante, es asertivo cuanto toma el pulso. Igual que los médicos, antes de recetar, toma pulso, respiración, genera un historial. En la política aplica lo mismo y no lo hicimos. Lo que se asume es una presencia personal, no de partido ni mucho menos de ideología. A mi me gustaría verlos parados, discutiendo temas ideológicos, la tesis del partido, democracia, justicia social. Es decir, creo que es algo absolutamente circunstancial y personalizado”.
Aterrizando en Querétaro, Burgos García dijo que aún existen referencias del partido fuerte y hegemónico que fue, hoy, no en sus mejores momentos. Recordó los dos periodos del Doctor Mariano Palacios Alcocer al frente del PRI y el paso de Fernando Ortiz Arana “Hay raíz. Hay elementos como para decir sí, mal momento, difícil para el partido. Mucho más para la dirigencia, pero la dirigencia no es el partido. Tienes un enfermo grave. Confío en que el PRI tenga una oportunidad. Hay mucho Priismo y gente dispuesta a trabajar. Entre los jóvenes hay dirigencias que no han tenido la oportunidad”. Y contra aquellos cuadros, advierte, ahora estará en el Congreso Federal una dirigente estatal como Abigail Arredondo y el vocero del PRI en lo local, Paul Ospital.
Descartando su salida del Revolucionario Institucional, Enrique Burgos García advierte que por encima de Alejandro Moreno, se encuentran la militancia, la gente de los barrios y colonias que en otro momento, fueron el pilar tricolor, partido al que recordó, le debe todo. Ante el amague que hiciera la otrora poderosa CTM de abandonar al PRI , Burgos García respondió “Yo no sé si lo cumplan. Lo digo con mucho respeto. No es la CTM de Don Fidel, ni siquiera del Güero Rodríguez. Es otra CTM con otra visión, otras coyunturas. Y lo digo con mucho respeto porque me apoyó siempre”.